Enfermarse de cáncer no es lo peor, lo lamentable es tener que por falta de recursos se debe de atender en el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Ciudad de México.- Enfermarse de cáncer no es lo peor, lo lamentable es tener que por falta de recursos se debe de atender en el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Con esa fatalidad, pacientes del Instituto Mexicano del Seguro Social han tenido que acudir al Instituto para atenderse de cáncer pero no para ser curados de dicha condición, sino a ser desahuciados o sometidos a largos periodos de espera, de largas en las consultas, realización de estudios y manejo irresponsable de expedientes médicos, todo esto en medio de condiciones de insalubridad que no son aceptables en una dependencia de salud pública.
Como parte de la campaña “Mi lucha es rosa”, el director del IMSS José Antonio González demostró que también vive en un mundo rosa, al menos así quedó patentado cuando dijo que el Instituto busca hacer del cáncer de mamá, una enfermedad del pasado.
Lamentablemente, el falso optimismo de José Antonio González contrasta con la actual situación que enfrentan los pacientes con diagnóstico de cáncer y que solamente tienen la opción de ser atendidos en hospitales del IMSS.
Un caso de este tipo fue reportado el pasado once de octubre por diario.mx, quien detallaba que desde hace dos meses la paciente Alicia Cordero Hurtado, de 37 años, fue desahuciada por médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), quienes la alertaron de estar invadida de cáncer, noticia trágica que al ser corroborada en instituciones de salud privadas, arrojaron que solamente tenía un tumor maligno en el pie izquierdo, hecho del que refiere al sitio de noticias, desde hace 16 años sufre molestias en él, mismos que se agudizaron en 2013 a un grado de impedirle caminar.
Ante esta situación tuvo un primer acercamiento con el IMSS a través del Hospital General Regional número 66 donde tras citas retrasadas, pérdida en más de una ocasión de su expediente, obtuvo los estudios con un diagnóstico fatal: estaba invadida de cáncer y no había nada qué hacer.
“Me dijeron que me amputarían la pierna arriba de la rodilla para darme más meses de vida, pero que ya ni siquiera tenía caso una quimioterapia”, señaló Cordero Hurtado a diario.mx.
En esa ocasión la mujer recibió la atención del oncólogo Ulises Santos Aguilar.
En un segundo estudio, pero esta vez realizado en un hospital privado, si bien le confirmaron cáncer en su pie izquierdo, con una tomografía descartaron que estuviera invadida por este en otras partes del cuerpo.
“El doctor del hospital privado me dijo que no sabía por qué me desahuciaron en el Seguro si sólo tengo cáncer en un pie”, indicó.
“Para los del Seguro ya estoy muerta, pero no tengo dinero para hacerme las intervenciones que me quitarán la enfermedad”, lamentó.
Otro caso opuesto al optimismo del director general del IMSS
En junio de este año, diariotribuna.net reportaba que Pastora García, originaria del municipio de Banderilla, Veracruz, llevaba cerca de dos años luchando contra el cáncer de mama. Pero la pesadilla de esta mujer no ha sido el tiempo que lleva batallando contra el cáncer o el diagnóstico mismo, su verdadera batalla es que ha tenido que suspender en diversas ocasiones su tratamiento porque de acuerdo a diariotribuna.net, le piden una tomografía que supuestamente tienen que realizarle en la clínica 11 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de esa región, donde por más de dos semanas no podían atenderla porque el tomógrafo está descompuesto.
“Me dijeron que no sirve, vine la semana pasada y me dijeron que no servía, vine esta semana y me dijeron que hasta el viernes y yo tengo consulta el 18, si no llevo esos estudios otra vez me voy a seguir atrasando. Mi salud no depende del tomógrafo” lamentaba García en su declaración al diario.
A pesar de que Veracruz ocupa el primer lugar en muertes de mujeres por cáncer mama y el segundo lugar en muertes por cáncer cervicouterino, la visión rosa del director general del IMSS no se traduce en atención médica de los afiliados al Instituto que tienen que acceder a los supuestos servicios que ofrece la dependencia.
El 23 de octubre, el usuario en Twitter @FDrerup publicó los siguentes tweets:
@qtf mi Tia le detectaron cancer de mama y ha sido un navegar y sufrir en el imss para las quimios y tratamiento.
— Fabiola Drerup (@FDrerup) octubre 23, 2014
@qtf no hay ayuda por parte del imss para el cancer de mama. Pura burocracia. Triste realida solo blabla no acciones
— Fabiola Drerup (@FDrerup) octubre 23, 2014
Por Octavio N. Cervantes
Los datos que publica el articulista, son realmente verdaderos y no solamente les suscede a quienes padecemos cáncer, sino a quienes padecen de otros males / enfermedades. Ya al ingresar a cualquier clínica del IMSS, no es solamente a ser altaneramente atendido ( porque casi todos los empleados de esa institución son sindicalizados ) y además, los médicos o prácticantes que nos atienden, tratan de explicarnos nuestros males en un lenguaje que quizá les enseñaron en la facultad donde “estudiaron”, pero que el derecho habiente común, no sabe lo que les están diciendo. Vamos a las recetas: nos expiden una o mas recetas, con medicamentos que no se sabe para que sirven y si se les preguntan, pues se ofenden. En cuanto a la higiene en cualquier area de cualquier clínica, es nula, exceptuando el área de los jefes o directores . Aquí finalizo, pues creo estar esperando transmitir el sentir de miles de derecho-habientes quienes por falta de dinero, no pueden atenderse con médicos particulares y en áreas con la mas elemental higiene.