Por más esfuerzos que Hacienda haga, la ley del mercado es clara y el precio de los combustibles seguirá subiendo por presiones externas.
Ciudad de México.- El precio de la gasolina Premium ya alcanzó los 20 pesos por litro y la Magna, de mayor consumo en el país, oscila entre los 18 pesos; sin embargo, el precio no ha alcanzado su tope en el mercado y mientras el costo del petróleo sigue subiendo, la importación de combustibles al mercado mexicano se mantendrá a la alza.
Ante el impacto que tiene el incremento del precio de la gasolina en la inflación, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) decidió incrementar a 60 por ciento el estímulo fiscal que aplica a los combustibles con la finalidad de evita que los consumidores compren más cara la gasolina.
La Subsecretaría de Ingresos de la SHCP destacó que para la semana del 5 al 11 de mayo se aumentó a 60.11 por ciento el estímulo fiscal aplicado a la cuota del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de la gasolina Magna y a 43.63 por ciento el estímulo para Premium, siendo estos los más altos aplicados por la dependencia federal en lo que va del año.
Así, por cada litro de Magna, detalló la dependencia, el consumidor pagaría un total de 4.59 pesos de IEPS, pero con el estímulo establecido para esta semana, sólo desembolsa 1.831 peso; en el caso de la Premium, el estímulo fiscal es de 4.363 pesos por litro, por lo que Hacienda absorberá 1.693 pesos.
A pesar de los esfuerzos de Hacienda, para lo que resta del 2018 los precios de las gasolinas están en riesgo de sufrir mayores incrementos.
El Departamento de Energía, del Gobierno estadounidense analizó al alza las proyecciones sobre comportamiento de su mercado de las gasolinas y pronostica que sus costos alcancen los 2.79 dólares por galón, precios que se pueden trasladar a los productos exportados.
El gobierno estadounidense alertó que el aumento en cotizaciones del petróleo observado en los últimos meses provocó el incremento de las gasolinas.
Desafortunadamente eso pasa al subir el petróleo, pero eso no lo es todo, los insumos, mano de obra y todo lo que conlleva la refinación de los combustibles es lo que encarece el producto final.
El Presidente Calderón hizo un llamado a los estados para construir refinerías, dos entraron al concurso y aunque hubo un ganador no se le entregó el recurso.
Esto lo seguiremos padeciendo no se cuanto tiempo ya que el construir una refinería tiene un alto costo y varios años para instalarla.
El gran reto al que deben enfrentarse los gobernantes es crear la infraestructura necesaria para crecer comprometidamente y demostrar que la riqueza natural que se presume tener, demuestre el beneficio a la población de esta gran nación mexicana.