El canciller mexicano se reunió con altos funcionarios del gobierno de Trump en Washington, donde reiteró su rechazo a la aplicación unilateral de disposiciones de Estados Unidos a México, principalmente en el tema de las deportaciones.
El secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, comunicó de manera oficial al gobierno de Estados Unidos el rechazo de México sobre la posibilidad de que sean separadas las familias de inmigrantes mexicanos que busquen ingresar a México, y reiteró que el país está abierto a continuar con la colaboración de la repatriación de los mexicanos, pero no aceptará imposiciones.
“Reiteré el rechazo a la aplicación unilateral de deportaciones de Estados Unidos a México”, indicó Videgaray en rueda de prensa desde Washington. “México es un país soberano y sólo México decide quién entra y quién no a su territorio”, añadió.
Videgaray señaló que su visita exprés a Washington fue en reacción a las intenciones del gobierno de Donald Trump de separar a las madres inmigrantes de sus hijos en la frontera e indicó que Casa Blanca aseguró que lo mencionado por el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kelly, no es una decisión tomada, sino sólo una propuesta.
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En su visita a la capital estadounidense, el canciller mexicano sostuvo reuniones de trabajo con el director del Consejo Nacional Económico de la Casa Blanca, Gary Cohn; con el asesor de Seguridad Nacional, Herbert Raymond McMaster; y con el asesor senior del presidente, Jared Kuschner; sin embargo, señaló que regresará en unas semanas para mantener el diálogo con la administración de Donald Trump.
Luis Videgaray Caso viajará a La Habana para participar en los trabajos de la XXII Reunión Ordinaria del Consejo de Ministros de la Asociación de Estados del Caribe (AEC), que se realiza en dicha ciudad bajo la presidencia del canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla.