A pesar de aún ocultar muchos misterios, se sabe que los agujeros negros pueden “devorar” todo lo que su gravedad logre atraer. Cuando dicho cuerpo captura en su onda gravitacional a otro objeto, comienza a estirarlo de forma vertical a través de un proceso conocido como “espaguetización”, el cual culmina en una forma de explosión de radiación mientras el objeto es devorado por el agujero negro.
Ahora, por primera vez, astrónomos de NASA lograron documentar el proceso en el cual la radiación es expulsada del agujero negro, gracias al telescopio Wide-field Infrared Survey Explorer (WISE).
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Según RT, cuando un objeto es tragado por un agujero negro, este último suelta un “eructo” compuesto de una llamarada de radiación, que destruye todo a su paso. Esta radiación logró captarse luego de que científicos utilizaran el telescopio WISE para medir en infrarrojo las emisiones de polvo estelar. Gracias a esta búsqueda, científicos estadounidenses de la Universidad Johns Hopkins lograron observar tres agujeros negros con dicha radiación, y otro más fue visto por astrónomos chinos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China.
“Esta es la primera vez que hemos visto claramente los ecos de luz infrarroja de múltiples eventos de marea masiva”, declaró Sjoert van Velzen, líder de este proyecto para la Universidad Johns Hopkins de los Estados Unidos.
International Business Times informa que estos cuatro descubrimientos no solo ayudarán a entender mejor como devoran los agujeros negros a otros objetos, también puede ayudar a localizar el polvo que envuelve a los agujeros negros supermasivos que se encuentran en los centros de la mayoría de las galaxias.
“Nuestro estudio confirma que el polvo está ahí, y que podemos usarlo para determinar cuanta energía se generó en la destrucción de la estrella”, comentó Varoujan Gorjian, astrónomo del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, quien era parte de la misma investigación.