La tragedia que dejó la explosión en Tlahuelilpan Hidalgo que ha dejado al menos 89 muertos y decenas de heridos, pudo haberse evitado, dijo el presidente López Obrador.
El número de fallecidos por la explosión de una toma clandestina en Tlahualilpan, Hidalgo, asciende ya a 89, en tanto que los heridos se cuentan en 55. En medio de la tragedia, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador adelantó que apoyará a las familias afectadas y advirtió que el incidente se pudo evitar.
El presidente López Obrador dijo este lunes que la explosión que acabó con casi un centenar de vidas pudo haberse evitado, y señaló que el robo de combustible por parte de ciudadanos fue resultado de la corrupción, de la pobreza y consecuencia de que los gobiernos previos dejaron de crear empleos.
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“Claro que se pudo evitar la tragedia, si no hubiese corrupción en México, si no se llevara a cabo esta práctica de robo. Si la autoridad no lo permitiera, si la gente, por necesidad, no llevara a cabo estas atrocidades”, comentó el mandatario este lunes en su rueda matutina al ser cuestionado sobre el incidente.
El fundador de Morena también adelantó que esta mañana recibió el reporte del inicio de una queja de oficio por parte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), órgano que estaría a cargo de una supuesta inacción por parte de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la contención de los pobladores que acudieron al sitio de la toma clandestina.
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Conforme pasan los días, también se ha cuestionado el procedimiento de las autoridades en torno al saqueo de combustible y posterior explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo. Para muchos, uno de los principales motivos de que la tragedia alcanzará dimensiones tan altas fue que las autoridades de Pemex tardaron demasiado en cortar el suministro de la toma que estaba fracturada y arrojaba cientos de litros de hidrocarburo a varios metros de altura.
El motivo de la tardanza
Este fin de semana, Petróleos Mexicanos confirmó que no cerró la válvula del ducto desde que se detectó la fuga, cerca de las dos con treinta de la tarde del viernes, porque no se registraron los niveles de presión que marca el protocolo.
Tuvieron que pasar tres horas con 50 minutos para que la toma clandestina fuera cerrada, tardanza que ha sido sumamente criticada por pobladores de Hidalgo y usuarios de redes sociales.
“Hay un protocolo que establece en qué momento debe cerrarse una válvula (…) es hasta que se incrementa la fuga y que llega al nivel que establecen los parámetros de seguridad que se cierran las válvulas y esto sucede a las 18:20, a las 18:30”, mencionó Alfonso Durazo Montaño, secretario de Seguridad del gobierno de AMLO.