Como parte de su temporada en el recinto de mármol y en el marco de los festejos por sus 60 años, la agrupación ofreció su repertorio coreográfico, que realiza un recorrido por el folclor de diversas entidades del país.
Ciudad de México.- Una danza fascinante y llena de movimientos y ritmos que traducen lo mexicano es la que presenta el Ballet Folklórico de Amalia Hernández, en el escenario principal del Palacio de Bellas Artes.
A dos presentaciones de concluir su temporada en este espacio –el 21 y 22 de diciembre-, el selecto cuerpo de bailarines confirmó porque están considerados como los mejores de su tipo a nivel internacional.
Desde Sonora hasta Veracruz, pasando por Chihuahua, San Luis Potosí, Michoacán y la costa chica de Guerrero, sin faltar el cuadro de Jalisco –que les ha dado fama mundial- estos virtuosos del baile dejaron entrever las manifestaciones estéticas enraizadas del folclore mexicano, deleitando a cerca de mil personas, quienes los ovacionaron al final con un fuerte y nutrido aplauso.
Diversas técnicas de la danza clásica y moderna, acompañadas de la música del huapango, sones jarochos, mariachi y música ritual también fueron transportadas al escenario con la danza de los “Matachines”, la del “Venado” y la de “Los Quetzales”, además de la “Charreada”, un baile en el que hacen increíbles suertes con el lazo, así como “Fiesta en Tlacotalpan”, número que provocó que los presentes se contagiaran de alegría.
La velada cautivó también con las coreografías “El Toro”, “Arranca Zacate” y “La iguana”, con las que los bailarines sorprendieron no sólo por el zapateado sino por el vestuario, representativo del folclor nacional.
Entre las coreografías, resaltó también “Las Adelitas”, pieza dedicada a las soldaderas, esas mujeres que combatieron y tuvieron un papel determinante en la lucha revolucionaria, al seguir a sus hombres a la guerra.
Desde los años 60’s, Amalia Hernández y el Ballet Folklórico de México han realizado presentaciones donde la música, el rigor técnico, los elaborados trajes típicos y las originales coreografías dejan una gran huella en los espectadores.
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