Después de años de trabajo se ha logrado recuperar una pintura mural en tan buen estado que podría revelar los secretos de la antigua ciudad mesoamericana.
Ciudad de México.- En la zona arqueológica de El Tajín fueron descubiertos miles de fragmentos de pintura mural ocultos en los cimientos del Edificio 40 del Edificio de las Columnas, en el punto más alto de la ciudad prehispánica.
De acuerdo con científicos de la UNAM los fragmentos fueron utilizados como relleno constructivo de otra edificación aproximadamente en el año 800 D.C. Los fragmentos aportarán nuevos indicios sobre la zona de El Tajín en su etapa del periodo Epiclásico.
Arturo Pascual Soto, investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) de la UNAM, y en entrevista al diario Crónica, comentó que este hallazgo “representan una fuente sorprendente de información que seguramente nos ayudarán a comprender aspectos que hasta hoy desconocemos del universo político y religioso de esta civilización”.
“Gracias a estos murales hoy sabemos que en Tajín se usaron escudos fabricados con la piel de algún animal de pelo largo y que se colocaban en el mismo brazo con el que se sujetaban las lanzas, como un especie de protector que servía para desviar los golpes con el brazo”, detalló.
Los restos de este antiguo mural están en proceso de consolidación en el IIE y su conservación es excelente, pues a simple vista es posible apreciar personajes con yelmos de jaguar y representaciones del dios Tláloc.
De acuerdo con especialistas el Edificio de las Columnas debió ser el centro de la vida política y religiosa de la antigua ciudad de El Tajín en tiempos de una Mesoamérica en plena fase de transformación.
Por encima de los restos del mural, también fueron hallados objetos de barro usados a finales del siglo XIX y principios del XX como cantimploras y pedazos de tubería que revelan los orígenes de la industria petrolera en la región.
El investigador asevera que de acuerdo con los fechamientos absolutos, efectuados a distintas muestras obtenidas de los morteros de cal, se ha determinado que fueron pintados en el primer cuarto del siglo IX d.C.
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