La Casa del Mendrugo ubicada en la ciudad de Puebla, fue rescatada en 2008 y actualmente cuenta con restaurante, café, museo y galería.
Una de las más admirables labores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) es aquella que realiza a favor del rescate de inmuebles con valor histórico y cultural. Tal es el caso de La Casa del Mendrugo ubicada en la ciudad de Puebla que fue rescatada de la ruina en 2008 para ser habilitada como espacio cultural.
Según relata Hugo Leicht en su libro Las Calles de Puebla, fueron los jesuitas quienes edificaron el inmueble gracias a los mendrugos (limosnas) que recibían de los devotos angelopolitanos.
Hasta 1767 la propiedad perteneció a esta orden religiosa, posteriormente, pasó a manos de la Iglesia Católica formando parte del Colegio del Estado y en la segunda mitad del siglo XIX perteneció a particulares, cambiando de propietario con frecuencia.
La vista estaba enmarcada por un enorme arco de piedra que le daba estructura al pórtico y elegancia de lo que fue un señorial palacio en el que el Emperador Don Agustín de Iturbide, el consumador de la independencia de México fue hospedado en 1821 en una de sus noches de grandeza.
José Ramón Lozano-Torres y Jorge Roberto Ortiz-Dietz, El Mendrugo y el Zapoteca, 2016
Actualmente, La Casa del Mendrugo cuenta con restaurante, café, museo y galería; cabe destacar que en este espacio, prácticaente todos los días del año, hay conciertos de trova, música de concierto, música del mundo, jazz, blues, soul, R&B, flamenco, tango, zarzuela, boleros y conciertos especiales.
El Museo Casa del Mendrugo cuenta con una exposición etnográfica acerca del pasado histórico de la ciudad; a su vez, alberga un entierro relacionado con la cultura olmeca, localizado en las inmediaciones del patio de la casona con piezas de cerámica y osamentas humanas con 3 mil 500 años de antigüedad.
Los restos de “Chuchita”, la habitante más antigua de Puebla (1501 a.c. – 1201 a.c.), se exhiben en una ventana arqueológica. También está la exposición de Mayólica y Talavera que cuenta con una colección restaurada de cerámica mayólica y talavera antigua de la época de la fundación de la ciudad, recuperada durante la reconstrucción de la casa.
Por último, en la exposición Amos por siempre, los visitantes pueden apreciar una colección de cráneos humanos con deformación intencional, huesos largos, caracoles trompeta gigantes, jambas y dinteles de piedra caliza y otros objetos provenientes del estado de Oaxaca.
Por su parte, la Galería de Arte Indígena y Contemporáneo La Casa del Mendrugo, tiene la intención de dar a conocer el trabajo de artesanos mexicanos, por lo que en esta área se pueden apreciar textiles, cerámica, joyería y mucho más.
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