Un taller de narración oral impulsa el estudio de esta manifestación que se caracteriza por contar historias para provocar emociones y mejorar la comunicación oral en público.
Ciudad de México.- Marilú Carrasco, quien desde hace 30 años se dedica a las artes escénicas, creó para la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México el taller de narración oral “Una ruta artística”, el cual imparte desde el mes de marzo pasado en las instalaciones de la dependencia capitalina como parte de un proyecto que realizó con una beca en la categoría Creadores con Trayectoria, que le otorgó el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA).
Para Marilú Carrasco la narración oral es un arte que tiene sus orígenes en la propia conformación del lenguaje humano, en sus necesidades primarias de escuchar y contar, de comprender el mundo.
“El ser humano no sabía leer ni escribir, pero sabía contar. Era el depositario de la tradición oral, el inventor de los mitos y leyendas”, señaló Marilú.
Argumentó que si bien narración oral ha sido una práctica enraizada en la vida comunitaria, en la actualidad se caracteriza por la conciencia sobre la práctica de narrar, por el manejo de las técnicas y la teoría de esta disciplina que en sí misma representa un suceso cultural contemporáneo llevado a la escena, que privilegia la comunicación directa, el aquí y ahora, entre narrador/a y público.
“Quien cuenta historias es un comunicador y un artista al mismo tiempo, produce emociones estéticas, sentimientos, evoca recuerdos, estimula la imaginación mediante la palabra y el gesto; pero, además, contamos para que las voces de la tierra, las voces de la sabiduría y de la verdad se escuchen fuerte”, apuntó la actriz.
La Secretaría de Cultura del Distrito Federal afirmó que quienes asisten al taller aprenden los fundamentos teóricos y prácticos del arte de narrar oralmente, en un espacio propicio para el juego, la confianza, la diversión y la reflexión.
“El programa de trabajo contempla el estudio de la oralidad artística como un sistema simbólico de expresión, de cómo funcionan los recursos de la oralidad decodificando los sentidos, comprendiendo la estructura del lenguaje, descubriendo la significación de los lenguajes no verbales y paraverbales, y cómo éstos inciden en los signos lingüísticos y en su proyección en la escena”, comunicó la narradora oral.
Un tema fundamental del taller también es el entrenamiento de los recursos expresivos: la voz, el gesto, el movimiento escénico, informó la Secretaría.
Otros de los aspectos que se abordan en el taller son las diferencias entre la comunicación oral y comunicación escrita, además del proceso de selección, adaptación y preparación de textos para ser narrados oralmente, la puesta en escena y prácticas con público.
De esta manera, se busca que los participantes obtienen los conocimientos “que les permiten desarrollar a plenitud este arte y ejercerlo profesionalmente, sea como artistas de la escena, para mejorar la comunicación y la presencia en público o como una herramienta en el ejercicio de su propia profesión o actividad laboral”, comentó Carrasco.
Al taller asisten personas de diversas profesiones y oficios, algunas laboran en los programas de la Secretaría de Cultura y otras provienen de otros ámbitos ligados a proyectos culturales de otras instituciones o bien son independientes.
Después de varios meses de entrenamiento, la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México señaló que ya se han realizado presentaciones con público.
El debut indicó, fue en la Biblioteca Central de Tlalpan, pero también se han presentado en la Feria Internacional del Libro de la Ciudad de México en el Zócalo, en dos actividades para celebrar el Día de Muertos (Faro Tláhuac y en Tepito), y en la Sala de Lectura Justita Arenas del Conaculta, dijo.