Actualmente, la Ciudad de México se encuentra en mantenimiento y crecimiento, creando edificios tan altos que la Torre Mayor ya no es considerada como el edificio más alto de la metrópoli.
Sin embargo, con los constantes rascacielos que se edifican en la capital del país, se hace la pregunta, ¿Qué ha sucedió con los parques urbanos y ecológicos de la CDMX? Cada vez que vez que se libera un espacio libre, el gobierno capitalino lo aprovecha para construir un nuevo edificio o un centro comercial, lo que hace menos el poder tener un espacio verde para los ciudadanos.
Se puede hacer la pregunta, ¿llegará un punto en que no haya árboles que proporcionen oxígeno para los seres vivos? Claramente, la CDMX cuenta con parques ecológicos, sin embargo, poco a poco, estos bellos recintos naturales se ven cada vez menos.
De acuerdo con el portal Natura Medio Ambiente, se requieren 22 árboles para poder proporcionar con el suficiente oxígeno para una persona al día. No obstante, también depende mucho de la edad del árbol, su especie, salud y en donde se encuentra plantado, pues no cualquier árbol necesita 22 de su tipo para que una persona pueda respirar.
En el caso de un parque público en la Ciudad de México es que son recintos naturales muy pequeños y se encuentran dispersos en la capital. Por ejemplo, tenemos un pequeño parque como los parques México y España en la colonia Condesa, seguido de parque de los venados en la delegación Benito Juárez, o el parque hundido en Insurgentes Sur, o el parque vivero Coyoacán, uno de los lugares más distinguidos de la CDMX.
Estos tipos de parque cuentan con una cantidad aproximada de miles de árboles de diferentes especies; capaz de proporcionar oxígeno por varias décadas, siempre y cuando se realice su debido mantenimiento.
De acuerdo con la revista Muy Interesante y los resultados llevados a cabo por la asociación Reforesta, un simple árbol proporciona con 42 kilos de oxígeno al año. En el caso de un parque pública de grandes proporciones en densidad de terreno y gran cantidad de arboledas como el Central Park de Nueva York, se podría generar hasta 10.5 millones de kilos de oxígeno, anualmente.
Tener un parque público cerca de la vivienda puede llegar a reducir el estrés de la persona, esto por tener acceso directo al aire fresco de la flora, sin mencionar que cuenta con una locación cerca para caminar y hacer ejercicio en un entorno ecológico y saludable o para poder pasear a su mascota.
Estos espacios naturales son vitales para nuestra comunidad. La mismísima planta verde con café es el ser vivo más importante para que podamos seguir teniendo una vida saludable y ecológica.