El tenor Francisco Araiza y las sopranos Joo-Hee Jung y Marija Vidovic ofrecieron un programa conmemorativo con poemas, escenas operísticas y la obra sinfónica Don Juan.
Ciudad de Mèxico.- Poemas en los que se hace referencia al amor, a la paz, la muerte y la soledad, así como escenas operísticas y la obra sinfónica Don Juan, fueron las piezas que integraron la Gala Richard Strauss, a 150 Años de su Natalicio.
El domingo 1 de junio, en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, el tenor mexicano Francisco Araiza, las sopranos Joo-Hee Jung (Corea) y Marija Vidovic (Croacia), y la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, con Srba Dinic como director concertador, rindieron homenaje a la memoria del compositor Richard Strauss. En el concierto estuvo presente el titular del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa.
Tras el anuncio de la tercera llamada y que los músicos afinaran sus instrumentos, aparecieron en el escenario el director serbio, el tenor, miembro permanente de la ópera de Zúrich, así como la soprano croata, para iniciar una serie de lieder (canciones líricas breves cuya letra es un poema al que se ha puesto música y escrita para voz solista y acompañamiento).
Morgen, op. 27, núm. 4 (Mañana) fue la pieza que abrió el concierto, cautivando al auditorio desde un primer momento por la música suave interpretada por la orquesta y la voz de Francisco Araiza, quien lanzó con su tesitura: “Y mañana brillará de nuevo el Sol / y por el sendero que recorreremos la felicidad de nuevo nos envolverá / en el seno de esta tierra embriagada de Sol”.
Acto seguido, Marija Vidovic mostró el control sobre su voz al ejecutar de manera calmada y delicada Die nacht, op. 10, núm 3. (La noche) al evocarla como un elemento que se desplaza furtiva y dulcemente sobre los árboles.
El programa continuó con la interpretación por parte de Francisco Araiza de Des dichters abendgang op. 47. núm. 2 (La caminata vespertina del poeta); Allerseelen, op. 10, núm. 8 (Día de difuntos); Heimliche aufforderung, op. 27, núm 3 (Invitación secreta); en la cual destacaron los violines que cerraron la pieza que hizo referencia al recorrido con el ser amado en medio del follaje.
Marija Vidovic continúo deleitando con las interpretaciones de Befreit, op. 47, núm. 2 (Liberación) que expresa la felicidad por un mundo construido por una pareja, basado en el amor; Freundliche vision, op. 48, núm. 1 (Amable visión), en la que se interpretó no haber soñado mientras dormía, sino que claro como el día, vio a su amado bellamente ante ella; y Cäcilie, op. 27, núm. 2 (Cecilia), con la cual la soprano arrancó sonora ovación al interpretar: “Si tú supieras lo que significa vivir sumergido en el hálito creador del mundo de la divinidad, ser sublimado por él y conducido por su luz hacia alturas divinas… ¡Si tú lo supieras, vivirías conmigo!”.
La primera parte de la gala la cerró la soprano coreana Joo-Hee Jung con las interpretaciones de Vier letztelieder (Cuatro últimas canciones), elegía a la vida, al amor y la muerte. La cantante con Frûhling (Primavera), September (Septiembre), Beim schlafengehen (Al ir a dormir), y Im abendrot (En la puesta del sol) en la que al final de esta cuarta pieza la cantante entonó en modo dramático la pregunta ¿Es esto acaso la muerte?
En la segunda parte de la gala la orquesta interpretó el poema sinfónico Don Juan, op. 20, personaje al que el compositor alemán le dio el matiz de que sin él la vida sería aburrida.
Posteriormente, ataviadas en vistosos vestidos, Marija Vidovic y Joo-Hee Jung interpretarían dos piezas de Ariadna en Naxos: Ein schönes war… y Es gibt ein reich, respectivamente.
El tenor Francisco Araiza, oriundo de la Ciudad de México y con una valiosa carrera operística internacional, salió al escenario para cerrar el programa con Falke! mein falke…, de la ópera Die frau ohne schatten (La mujer sin sombra); arrancando vítores a los presentes.
A petición de los asistentes, después de haber recibido arreglos florales y despedirse del escenario, el artista internacional regresó para cerrar el evento con Zueignung (Dedicatoria), canción en la que un hombre agradece a su amada por haberlo redimido y salvarlo, dando así fin al concierto producido a cargo de Ópera de Bellas Artes.
El compositor alemán Richard Strauss ha sido motivo de celebraciones en todo el mundo musical, pues el aniversario 150 de su natalicio se celebra el 11 de junio de 2014, recordado como un compositor que se hizo particularmente de un nombre gracias a una serie de poemas sinfónicos de tono experimental que ahora son pilares del repertorio orquestal.