¿Te has preguntado de donde vienen todos tus cambios de humor? ¿Por qué estas irritable todo el día? ¡El azúcar es el enemigo! pero puedes aprender a controlarlo.
La nutrición tiene todo que ver con tus cambios de humor. Estar enojado, estresado, alterado, ansioso o melancólico puede depender completamente de aquello que decides consumir como parte de tu dieta. Los azúcares y harinas refinados como pasta, arroz blanco, papas y pan son los causantes más probables de que en la mañana le hayas gritado a tu hijo, que por la tarde hayas sudado la gota gorda en la oficina y que por la noche no quieras ni voltear a ver a tu pareja.
Aunque los azúcares y carbohidratos refinados son mejor conocidos por sus efectos en el aumento de peso, éstos alimentos son, en realidad, la raíz de todo mal. Aumentan la fatiga, antojos y cambios abruptos de humor por lo cual cortar con ellos puede hacer un cambio tremendo en la forma a la que estas acostumbrado a vivir. Imagina que todo aquello que te molesta se desvanece, la irritabilidad se fue, el enojo es cosa del pasado y el estrés una mera carga soportable, todo gracias al cese en tu ingesta de carbohidratos refinados.
Los efectos del azúcar en tu cuerpo
Esta bien, es momento de aclararlo. No sólo los ‘dulces’ son azúcar. El azúcar se encuentra en muchos alimentos (como frutas, verduras y legumbres) y también es el resultado del procesamiento de otros tantos (como harinas y alcohol), así que cuando los profesionales de la salud te recomiendan bajar tu ingesta de azúcares no se refieren sólo al polvo blanco que sale de la caña.
Ahora que este tema quedó aclarado, pasemos a revisar los efectos que tienen los azúcares en tu cuerpo. Mientras que deterioran la regulación de energía en tu cuerpo, también pueden interrumpir el proceso natural de una de las hormonas más importantes del organismo: insulina. La insulina se encuentra estrechamente conectada con el resto de las hormonas, incluyendo estrógeno y testosterona.
¿Sabias que las mujeres con síndrome pre menstrual consumen 27% más azúcar? ¿O que los hombres reducen su testosterona en un 25% después de ingerir comidas azucaradas?
Cuando la insulina se eleva, normalmente después de ingerir altas cantidades de azúcar (o comidas que se convierten en azúcar), los niveles de una proteína importante, conocida como hormona sexual globulina vinculante, disminuyen. Ella se encarga de limpiar el exceso de estrógeno y testosterona en la sangre y cuando llega a faltar se produce el caos.
¿Por qué? Mientras que muchas personas piensan en el estrógeno y la testosterona como productores principales de los caracteres sexuales externos e internos, lo cierto es que estas hormonas tienen un papel más importante dentro del cuerpo: controlan nuestro estado de ánimo. Cuando existen en mayor o menor medida tendemos a estar irritables, ansiosos, presentar insomnio, y mucho más.
En lugar de no azúcar, aprende a controlar la glucemia
Cortar toda relación con el azúcar es una tarea cercana a lo imposible -sin mencionar un tanto dolorosa- ya que toda la comida tiene cierto nivel de azúcar en ella. El truco esta en reducir tu ingesta glucémica. Es decir, qué tanto de esos alimentos ingieres en cada comida. Tu propósito debe ser incrementar gradualmente el azúcar en tu sangre y la insulina para evitar picos elevados o caídas dramáticas.
Es simple, los azúcares refinados causan picos en tus niveles de insulina. Los carbohidratos complejos por otro lado… las fibras, proteínas y las grasas saludable promueven un incremento y decremento gradual en el azúcar de tu sangre y la insulina. Al mismo tiempo reducirán tu carga glucémica y eliminaran las hormonas extras.
Así que si esperas tener mejor humor piensa en cambiar el arroz blanco por integral o salvaje. Remplaza las papas por camote. Intenta comer más aguacate y agrega una dosis extra en tu plato de vegetales en lugar de pasta o pan y deja el refresco (elije el agua mineral con algo de limón).
