El “Señor de la Guerra”: la historia de Bosco Ntaganda

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En el 2005 el actor Nicolas Cage Protagonizó el filme  “El Señor de la Guerra”, donde se muestra a un hombre de origen ucraniano que lucra con el tráfico de armas. Basada en hechos reales, la película cuenta la historia de Yuri Orlov; nacido en Ucrania, radicado en el barrio del Bronx, en Nueva York; luego de trabajar en un restaurante ruso en compañía de su hermano, adquirió poder después de iniciar a proveer granadas, balas y armas tipo UZI, lanzamisiles y armas largas AK-47 a las guerrillas en Medio Oriente, Sudamérica y África, además de exhibir los lujos que obtuvo al comerciar con artillería de la ex Unión Soviética. Fue entonces que en el llamado Continente Negro, consigue a dos de sus mejores compradores: el militar liberiano Baptiste Padre y su hijo Baptiste Junior. En el filme se da a entender que el dictador ascendió al poder luego de guerrillas suscitadas en Liberia y de dejar a su paso destrucción, sangre y terror en la población.

En una escena, Baptiste Senior le explica a Orlov que durante años el dictador fue denominado como “El Señor de la Guerra” debido a los actos que llevó a cabo para ascender y mantener su poder al frente de su país: derrocamiento del poder, lujos como armas bañadas en oro, abuso de mujeres, obtención de piedras preciosas para la compraventa de armamento, son sólo algunos de los hechos que se muestran en el largometraje. Esta pequeña reseña sirve como preámbulo para conocer la historia de un hombre cuyo tenor es el mismo que el personaje liberiano.

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Bosco Ntaganda, mejor conocido como “Terminator” ha sido una de las figuras más peligrosas a nivel mundial, originario de Ruanda, tuvo que emigrar a temprana edad a la República Democrática del Congo debido a los constantes ataques que se realizaban a su etnia, Tutsi.

Luego de cumplir 17 años, Ntaganda tomó las armas y se unió a los rebeldes que se oponían al genocidio en Ruanda. Con el paso de los años y al seguir en disputa con diferentes grupos, llegó a liderar el Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo.

En el año 2006 la Corte Penal Internacional lo acusó de reclutar de manera forzada a niños, además de otros cargos como violación y esclavitud sexual, asesinato, persecución basada en la etnia y ataques deliberados a civiles.

El líder rebelde es sospechoso por trece cargos de crímenes de guerra y cinco por lesa humanidad en el Noreste del Congo desde el año 2002 y hasta septiembre del 2003. De acuerdo con informes otorgados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y por Human Rights Watch (HRW), Ntaganda ha usado unidades militares para proteger sus intereses financieros y manejar operaciones de contrabando de minerales a gran escala, se estima que manejaba ingresos con un valor de 15 mil dólares a la semana.

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Además, el reporte que impartió HRW indica que a pesar de haber sido un prófugo de la justicia, cenaba en los más finos restaurantes, jugaba tennis en hoteles de lujo, tenía un bar, una granja y una mansión, por lo que se exigía que se le arrestara ya que la Corte Penal Internacional (CPI)ya había levantado un acta en su contra para arraigarlo. De acuerdo con Wikileaks, en un cable emitido en 2010, demostraba que al parecer Bosco tenía amigos en puestos altos del gobierno, el documento explica que Joseph Nzabamwita, encargado del Servicio de Seguridad Nacional le advirtió al embajador de la Unión Europea, Roelan van de Geer que el arresto de Bosco podría desestabilizar la situación del país.

Asimismo, el 21 de julio de 2012 el observador de Derechos Humanos acusó al gobierno de los Estados Unidos por cubrir información acerca de los rebeldes que han sido acusados por crímenes por la CPI. Debido a la alianza estratégica que los norteamericanos tienen con Ruanda. Tiempo después, se supo mediante otro cable emitido por Wikileaks que las fuerzas armadas estadounidenses adiestraron a los rebeldes en Ruanda, donde se explica que en un lugar cerca de Goma, personal de Ntaganda fue entrenado por la armada norteamericana en noviembre de 2009.

El organismo observador acusó que dentro del país congolés se juegan muchos factores económicos que tienen que ver con yacimientos de minerales, por lo que sugiere que existen más de dos países involucrados en el “juego” para expropiar material pétreo. Fue entonces que el pasado 18 de marzo de 2013 el líder rebelde congoleño se rindió ante la embajada de los Estados Unidos en Kigali, Ruanda, donde se pidió de manera inmediata que fuese trasferido a La Haya y para el 22 de marzo del año pasado, ya se encontraba en el ICC.

Pasaron más de 365 días de la aprehensión de Ntaganda y los habitantes de diversas poblaciones en la República Democrática del Congo, han declarado que se vive un ambiente tenso, más cuando se menciona su nombre en las calles. “La memoria que tenemos de él (Ntaganda) es de guerra, fuimos masacrados aquí, y eso sin mencionar las violaciones” dice uno de los habitantes congoleses. “Sí lo conocí (a Ntaganda), era un tirano que metía a los niños a las fuerzas armadas y violaba a las mujeres, cuando vine aquí fue la misma historia, trabajaba para Nkunda” indicó un tendero entrevistado por la agencia AFP.

“Bosco Ntaganda es alguien que vino aquí para realizar masacres, fue todo lo que hizo (las mujeres) fueron violadas y los niños obligados a entrar a la milicia, ese fue su trabajo”.

A poco más de un año de su captura voluntaria, se sigue especulando el por qué de su petición, algunos especialistas sugirieron que pudo haber sido porque Ruanda le dio un ultimátum a Ntaganda con el fin de ejercer su influencia en la comunidad o bien, hacerle creer a la CPI que se tiene un control de la situación.

A su llegada a una audiencia en febrero de este año, declaró:

“Mi nombre es Bosco Ntaganda, cuando llegué a la CPI era un soldado, pero ya no lo soy”. Exclamó en su idioma (Kinyaruanda) durante la audiencia efectuada en La Haya.

 

Luego de haber sido arraigado, Ntaganda enfrenta cargos ante la CPI y el pasado cinco de marzo, jueces del organismo internacional  denegaron la libertad condicional que había pedido su defensa. Los jueces señalaron que la sala de apelaciones criminales estudió la petición, sin embargo, de acuerdo a dos informes de expertos en Naciones Unidas sugieren que la detención es inevitable y necesaria. A su vez, dos jueces de la sala discreparon y consideraron que se cometieron errores al basar su decisión en los testimonios recogidos en los informes de los dos expertos.

Aunque el personaje fílmico se haya basado de acuerdo a sus creadores, en el político liberiano Charles Taylor, este “Señor de la Guerra”, al igual que su homólogo cinematográfico, tuvo enormes beneficios por parte de su poder; gustos lujosos, armas, abuso de poder, reclutamiento de infantes en la milicia; sin embargo, por presiones de organismos internacionales, se vio envuelto en el ojo del huracán luego de los cables emitidos por Wikileaks. Aún no se sabe con exactitud, por qué, alguien que fue protegido por altos mandos, incluso estadounidenses, se haya entregado de manera voluntaria, por lo que resta mantener las expectativas sobre la resolución que deliberará la Corte Penal Internacional sobre el “Terminator” congolés.

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