De un lado para el otro saltan los políticos, unos se suben, otros se bajan o los bajan, la cuestión es tener fuero y así vivir con impunidad, o bien, seguir manteniendo sus privilegios a costa de lo que sea. Muchas veces me pregunto ¿por qué al único que le han buscado hasta por debajo de la lengua es a Lopez Obrador? Y a éste no le han podido encontrar nada, en cambio, ¿qué periodista o partido político ha visto las residencias de los actuales secretarios de Estado? Me queda claro que las complicidades en la corrupción son fraguadas en pactos indecentes, ya que ninguno de los actuales políticos en el candelero hubieran podido pagar con sus sueldos las casas en las que viven o los ranchos, las escuelas y universidades de sus hijos. Son muy pocos funcionarios públicos a los que conozco como gente honesta, claro que los hay, pero son tan pocos que estos son contagiados de la mala reputación de quienes han abusado de sus puestos para enriquecerse y la gente cree que todos son iguales, generando así un desprecio enorme por los políticos en general e impidiendo de esta manera que la política sea un medio de gestión para mejorar la condición del país y de los ciudadanos.
Por otra parte, da vergüenza cómo nuevamente las campañas políticas son un estercolero en donde se baten unos a otros con todo y casi nadie hace propuestas, los mexicanos estamos cansados de los políticos rijosos y, sobre todo, cuando al mismo tiempo son tan cobardes, arrojan la piedra y esconden la mano.
La democracia debía habernos servido, entre otras cosas, para acabar con la impunidad y la corrupción, pero cuando vemos que casi todos forman parte de lo mismo, nos damos cuenta que hemos caído en una farsa de la que no escaparemos a menos que se consiga cambiar el sistema y se de autonomía real a los poderes.
México está peor que nunca, mentira que se haya avanzado en términos reales, hoy somos más, y aunque se genere empleo éste no alcanza, la demografía nos gana, es mentira la lucha en contra de la inseguridad, me consta ¡que es falso! En ellos sólo se salva el ejército y la armada, lo demás es nuevamente una farsa.
El bienestar social es otra de las mentiras que nos cuentan, hay más pobres que nunca y ¡estos son más pobres que antes! La clase media pauperizada, el tejido social fracturado, muchos medios de comunicación coludidos.
El sistema de justicia sigue siendo repudiable en la mayoría de las veces, y cuando algún juez hace bien su trabajo puede llegar a perderlo si no siguió las instrucciones que vienen de arriba y, en ocasiones, no precisamente del mismo poder judicial.
Ojalá que los mexicanos seamos capaces de discernir entre lo que vemos en los medios de comunicación y la realidad, que veamos que son muchos quienes se dedican a desinformar para beneficiar a quien les paga. Ojalá que los mexicanos seamos capaces de castigar con nuestro voto a aquellos responsables de mantenernos en la ruina, y de exigir que quienes se han favorecido estando en poder, sean juzgados a pesar del fuero que pudiere corresponderles o del poder bajo el cual se cobijan.
@ fschutte
Señor Schutte, si bien el problema de la seguridad es un tema que a todos nos preocupa considero que el tema de la corrupción, la fallida democracia etc. van más allá de si a un candidato “no le han encontrado nada” … El problema en México es de educación y viene de raíz de dos siglos de buscar caudillos que nos salvarán de la pobreza, de la corrupción, de lo mal que va el país. En fin hay que empezar por nosotros mismos, buscando que nuestros hijos y familias tengan como preceptos el valor de la honestidad, la solidaridad con el otro, el respeto a las instituciones, el valor del esfuerzo personal y el trabajo duro para salir adelante. En la medida que entendamos que la solución no está en los demás sino en nosotros mismos es como avanzaremos en el país. Respeto su opinión pero no estoy de acuerdo en que el país está cada vez peor al igual que la economía.
Iván, muchas gracias por su comentario, que no distinto a lo que pienso, un saludo