El cambio tiene la falsa apreciación de que siempre es para mejorar. No sé porque existe esta optimista inclinación que, además, carece de lógica real. Las autoridades de la Universidad de Guadalajara recientemente habían tenido la gran idea de entregar por completo el inmueble para el uso exclusivo de las exposiciones del Museo de las Artes. Con esta decisión llegó extraña orden de remover a la Licenciada Suny Ramírez que fue su directora durante 16 años. El trabajo de Suny Ramírez al frente de este museo mantuvo una coherencia hacia las artes plásticas que permitió la exposición de artistas muy sólidos y talentosos que existen en Jalisco. El mensaje está en las formas. Pedirle a Suny Ramírez un curriculum para integrar una terna es un insulto.
La Universidad debería saber tratar a sus colaboradores, un cambió no implica un mal trato. Y la nueva elección ¿es para mejorar? La actual directora Maribel Arteaga dice que va a innovar: “Innovar también para mí significa tener colecciones especiales de joyería, de moda, siguen siendo artes visuales, no solamente es pintura o escultura, se ha trabajado muy poco fotografía, por ejemplo, las artes digitales, sí hay donde innovar, el concepto de los happenings, instalaciones, cosas que sucedan hasta en el exterior del museo” e insiste en obras “novedosas como videos o instalaciones”. Un museo no está para seguir la moda, un museo, se supone, aporta conocimiento a través del arte. Si el criterio va a ser la “novedad”, lo llamativo y lo que tenga la atmósfera de contemporáneo, podemos temer que este museo se pierda para las artes plásticas y sea un recinto más para el arte VIP, video, instalación y performance o como anacrónicamente le llama la nueva directora “happenings”. Lo que sucede con estos cambios es que en el afán de la novedad que ya no es nueva (le informo a la Lic. Arteaga que estas expresiones “nuevas” tienen 100 años cumplidos), es que dejan a los museos en manos de los curadores, los artistas mediocres y se vacían de público.
En la Ciudad de México hay sobre población de museos que exponen arte VIP y todos, los de la UNAM y Bellas Artes, están siempre vacíos, y cuando “actualizan” una exposición como hace el MUNAL el público no asiste. Mi llamado es abierto y a la comunidad Universitaria: No expulsen a las artes plásticas de un recinto únicamente para satisfacer al mercado y a la moda. Jalisco tiene grandes pintores, grabadores y escultores con obra contundente que tienen derecho a exponer y no quedarse fuera a cambio de poner una novedad como un video. La exposición de obras debe ser equitativa porque la comunidad Universitaria debe tener acceso a arte de calidad no sólo a “novedades”. El programa de la Lic. Arteaga lo único que tiene claro es la novedad, la instalación de una cafetería y una tienda. Con ese criterio, de verdad, no hay queda mucho optimismo para vivir un cambio. Espero por el bien del arte, que no dejen fuera a las artes plásticas, que es un deseo, casi en el vacío.