El Museo del Palacio de Bellas Artes nos ofrece, de nuevo, una exposición que no podemos dejar pasar, los Tesoros de la Hispanic Society of America, que exhibe más de 200 obras de uno de los mayores coleccionistas sobre arte hispánico, el estadounidense Archer Milton Huntington (1870-1955) quien, en 1904, fundó una sociedad en Nueva York, con el objetivo de exhibir no solo lo comprado a lo largo de su vida, sino crear un centro de estudios sobre el tema en Estados Unidos de América.
La muestra plantea un recorrido cronológico por la historia de España (incluida la época en la que América fue parte del reino). Inicia con dos espléndidas obras procedentes de Itálica, ciudad fundada por los romanos en Hispania (hoy, a las afueras de Sevilla): un mosaico de un piso de una casa y un busto de un joven romano. El detalle de la forma y colorido de las teselas que forman el pequeño mosaico, nos brindan una idea de la magnificencia de las edificaciones en ese momento, al igual que el trabajo del mármol en los detalles de las facciones del rostro y, sobre todo, el pelo del joven (al que también pueden observarse algunos detalles de su bigote).
El camino de la museografía nos conduce después al momento de fusión de dos culturas: la española y la árabe, para mostrarnos la gran riqueza del mundo mudéjar que nos dejará asombrados a partir de sus textiles (muy bien conservados) y varios objetos, entre ellos, un píxide, que se utilizaba para almacenar almizcle, alcanfor y ámbar y que, en la época cristiana, también se utilizó como relicario. Cabe señalar que esta obra aparece en múltiples libros de historia del arte islámico y hoy tenemos oportunidad de apreciarla con todo detalle; desde sus decoraciones arabescas hasta sus también detallados herrajes. El recorrido se complementa con una amplia colección de cerámica que abarca hasta la época de los Reyes Católicos.
Las piezas del Renacimiento y del Barroco que se presentan, nos invitan a detenernos en varias de ellas. Destacan varias, pero menciono solo tres: un mapa hecho por Giovanni Vespucio con base en los apuntes de su tío, Américo. El Retrato de una niña de Diego Velázquez, uno de los grandes exponentes del Barroco español (si no que, el más grande de todos), en el que podemos admirar el sfumato, recurso de la pintura que difumina los contornos –sobre todo, del rostro–, y que brinda una sensación peculiar, cómo si los retratos “cobraran vida”.
Y una colección de pequeñas esculturas Los cuatro estados del alma, piezas provenientes del virreinato de Nueva Granada, que reflejan las estadías entre la muerte y el infierno, el purgatorio y el cielo, piezas únicas en su tipo. Libros miniados, joyería y objetos religiosos complementan esta parte, así como pinturas de El Greco, Zurbarán y varios artistas novohispanos.
El tránsito del siglo XVIII hacia el siglo XX se enriquece con las obras de “La Duquesa de Alba” de Francisco de Goya y Lucientes (además de otros retratos de la época) y la obra de Joaquín Sorolla (a pedido expreso del coleccionista para enriquecer la sede de la Sociedad en Nueva York).
Les recomiendo observar todos los videos de las distintas obras de la muestra. En menos de dos minutos, enriquecen nuestros conocimientos y nos permiten disfrutar con mayor detenimiento los auténticos Tesoros de la exposición.
Tesoros de la Hispanic Society of America se presenta en el Museo del Palacio de Bellas Artes hasta el 23 de septiembre de 2018. Martes a domingo de 10 a 18 hrs. Con credencial de estudiante, maestro y adultos mayores, entrada libre. Público nacional, $65. Domingos, entrada libre general.