Hace algunos meses escribí en uno de mis artículos que la tubería de proyectos en el país se estaba vaciando. Lamentablemente ya casi se vació y la consecuencia evidente es que la economía no está creciendo.
Expresándolo de manera honesta y tomando en cuenta que es un arranque de gobierno con cambios trascendentales, es de justicia reconocer que la expectativa de que este primer semestre creciéramos a un ritmo del 4% era muy improbable.
Conscientes de esta situación, la Secretaría de Hacienda ha lanzado un programa importante de apoyo para el crecimiento, básicamente otorgando créditos.
En mi opinión, esto no va a ser suficiente para que México crezca a la velocidad que se necesita, el Estado no tiene la capacidad para hacerlo sin el apoyo de los empresarios que son los tomadores de riesgos.
No estoy pensando en los grandes empresarios; para que el crecimiento se dé necesitamos que la mayoría de las empresas medianas y pequeñas le apuesten al país, que de verdad crean que si arriesgan su capital, la probabilidad de que les vaya bien sea alta, que se emocionen y empiecen a diseñar proyectos a futuro; de nada sirve dar créditos a las empresas si éstas no tienen proyectos viables y rentables de mediano y largo plazo.
Se dice fácil, pero para que esto suceda es indispensable que los tomadores de riesgo, todos, grandes y pequeños, tengan la confianza y la ilusión de que México es una buena apuesta, y que si invierten y trabajan honestamente tendrán un buen futuro ellos y sus hijos.
A mi parecer, es responsabilidad del gobierno mandar las señales correctas para que se lleve a cabo y que todos los mexicanos nos sintamos incluidos en un gran proyecto en el que sea México un país ganador, y con un gran futuro para todos los más de 120 millones de mexicanos.
No es muy complicado saber cuáles son las señales que en general se necesitan mandar, en síntesis son:
- Seguridad, saber que tú y tu familia regresarán a casa todos los días sanos y salvos.
- Estado de derecho, que todos juguemos bajo la mismas reglas; si se vale no pagar impuestos, que nadie paguemos, o de lo contrario, que todos paguemos. Si se vale el contrabando, que todos podamos hacerlo, y si no se vale, que el que lo haga sufra las consecuencias.
- Instituciones fuertes, confiables e independientes.
- Derecho a la salud para todos y en igualdad de condiciones. La meta para mí es que esto se pague de impuestos generales, pero para que se pueda hacer es indispensable que todos contribuyamos con los impuestos de manera correcta, la economía informal es un lastre para que el país avance.
Me parece básico que se transmita que el reto es acabar con la pobreza, no con la riqueza.
Se puede hacer una lista muy larga, pero, simplemente con esto, creo que podemos lograr resultados significativos como país.
El reto para que este gran cambio que se dio sea para bien, es que este nuevo gobierno logre mandar las señales correctas, y que le creamos que nos va a cumplir y respetar lo ofrecido.
Si logra transmitirlo, el país se llenará de proyectos y el crecimiento se dará.
Totalmente de acuerdo.
Totalmente de acuerdo mi querido Salomón