El Homo telecom, es decir, el hombre de la comunicación a distancia oscila entre la movilidad y el sedentarianismo de la conectividad. Pero hoy, la movilidad está siendo más funcional y atractiva para nuestra operación social integral.
En números, al cierre del 2018, las líneas celulares en operaciones se aproximaron ya a la evasiva barrera de los tres dígitos, el ciento por ciento de teledensidad móvil, con las 121.8 millones de líneas activas (5.5% más que en 2017). Esto se traduce en un coeficiente de penetración de 96.7%.
El ritmo de crecimiento de este mercado permite anticipar que finalmente, será en la segunda mitad del año en curso cuando alcancemos la teledensidad móvil superior al 100%.
Líneas en Números
La tradicional estacionalidad del cierre del año (ofertas y promociones del Buen Fin y de Navidad) dan pauta a fuertes ventas de líneas y de dispositivos móviles.
En el cierre del año anterior destacaron los esfuerzos de AT&T de seguir profundizando su oferta de servicios móviles de última generación, para aproximadamente cien millones de personas, todo, con estrategias y competitivas en el mercado de prepago. Su crecimiento anual de líneas fue de 21.3%, para llegar a 18.3 millones totales, con un marcado enfoque al subsegmento de prepago.
Por su parte, Movistar creció 4.9% en su comparativo anual, al registrar 26.3 millones de líneas, mientras que el agente económico preponderante (AEP) Telcel aumentó su contabilidad 2.2% anual, para un total de 75.4 millones de líneas.
De esta manera, al cierre del año, Telcel ostenta 61.9% de las suscripciones del segmento móvil, Telefónica 21.6%, AT&T 15.0% y los Operadores Móviles Virtuales (OMVs) sólo 1.4%. De manera anual, Telcel redujo 2.0 puntos porcentuales (p.p.) su participación de mercado, aun considerablemente por encima del nivel de 50% que lo determina como agente económico preponderante (AEP). Telefónica perdió 0.1 p.p., mientras que AT&T y los OMVS ganaron 2.0 p.p. y 0.2 p.p., respectivamente.
Los segmentos: Prepago y Postpago
El segmento móvil en México se compone mayoritariamente por usuarios de prepago. Sin embargo, en los últimos periodos esta proporción se ha rebalanceado ligeramente, sobre todo por la oferta de equipos con financiamiento, facilidades de pago, atractivos planes de datos y menores requisitos de entrada en postpago.
Al cierre de 2018, 81.7% de las líneas móviles eran de prepago, mientras que tan sólo hace cuatro años esta proporción era de 85.0%.
Movistar es el operador que cuenta con mayor proporción de líneas de prepago, con 91.0% de su base de clientes, seguido de Telcel que cuenta con una proporción de 82.1% de sus líneas.
Por su parte, en AT&T la contabilidad de usuarios de prepago asciende a 66.9% de sus suscriptores, con una tendencia al alza.
Dinámica de Ingresos
La dinámica al cierre del año registra una desaceleración relativa respecto a la tendencia registrada durante los primeros tres trimestres del año (crecimiento promedio anual de 9.7%). Ello atribuible principalmente a una ligera desaceleración en la venta de dispositivos móviles en el periodo de promociones de “El Buen Fin” y de estacionalidad de las fiestas decembrinas.
En el agregado anual, la operación de los jugadores en el mercado resultó en una generación de $282,255 millones de pesos durante 2018, 8.4% más que en 2017, porcentaje más de cuatro veces superior al crecimiento de la economía en su conjunto.
En su segmentación por componente de ingresos, destaca aquel correspondiente a la venta de equipos (34% del total), con un incremento de doble dígito (24.2%), con respecto al año anterior. Este crecimiento es atribuible a la oferta y adquisición de equipos de gama alta que tienen precios más elevados, por la depreciación cambiaria del peso, así como por la disminución de subsidios por parte de los operadores.
Por su parte, los ingresos por la venta de servicios (66% restante) registraron un crecimiento anual de apenas 1.3%, impulsado por el creciente consumo de datos móviles, especialmente en la modalidad de prepago, con una navegación ascendente, gracias a los planes cada vez más accesibles para la mayoría del mercado.
En el agregado anual para 2018, Telcel ingresó $199,042 millones de pesos (mdp) con un crecimiento anual de 11.9%, explicado por un aumento en la venta de servicios de 9.4% y equipos de 15.8%. AT&T obtuvo ingresos por $55,196 mdp con crecimiento anual de 3.9%. Movistar sumó ingresos por $27,001 mdp, una caída anual de 5.8%, atribuible a la reducción en los cargos de interconexión y por la caída de los precios unitarios en el mercado a consecuencia del entorno altamente competitivo.
En tanto, el conjunto de los Operadores Móviles Virtuales (OMV) registraron ingresos totales por $1,015 mdp, 37.7% más que el año anterior que, sin embargo, siguen representando únicamente 0.4% de los ingresos totales del mercado móvil. Sin duda, este segmento de operadores móviles virtuales tiene un amplio potencial de expansión de negocio, en tanto logren identificar sus nichos y segmentos dentro de tan dinámico sector.
En su estructura por operador, se registra una reconcentración en ingresos y regresión competitiva, tal que el operador preponderante (Telcel) registró un aumento en su participación de mercado, al pasar de generar 68.2% del total de ingresos en 2017 a 70.7% al cierre del 2018, un aumento de 2.5 puntos porcentuales (pp) entre un año y otro.
Esto es un nivel de concentración similar al que ostentaba dos años atrás, a inicios de 2016.
Movilidad Universal con Regresión Competitiva
La movilidad es la marca de la época que vivimos, en donde los usuarios hemos desarrollado un complejo conocimiento y apreciación tanto de la conectividad y las ofertas comerciales, como de los dispositivos y sistemas operativos en los que operan.
Consecuentemente, en el 2018 estos servicios se caracterizaron por retomar una senda de dinamismo, tanto en la métrica de contabilidad de líneas como los ingresos del conjunto de operadores que participan en el mercado.
No obstante, la estructura del mercado móvil registra un escaso rebalanceo competitivo en las métricas de líneas, que definen la preponderancia.
En ingresos, llama la atención que este operador continúa ganando terreno de mercado para recuperar niveles de concentración similares a los registrados dos años atrás.
En México, el regulador debe procurar el ejercicio eficaz de medidas que alleguen un ecosistema competitivo, puesto que el operador preponderante aún ostenta siete de cada diez pesos generados en el segmento.
Las medidas de preponderancia no han podido subsanar esta falla de mercado que provee ventajas por medio de las economías de red y alcance generadas por una mayor base de suscriptores.
La gestación de condiciones de mayor cobertura, mayor disponibilidad de servicios, mejor calidad y menores precios depende de una nivelación efectiva de mercado entre operadores.
Por ello, se deben enfatizar los esfuerzos desde la aplicación y cumplimiento regulatorias, para alcanzar este cometido, en especial aquellas medidas de regulación asimétrica pendientes de implementación efectiva.
En la nueva revisión de medidas de preponderancia, el IFT debe definir de una vez por todas mecanismos compensatorios y aceleradores que aseguren un ecosistema realmente competitivo en las telecomunicaciones en México, que se traduzca en beneficios tangibles de largo plazo para los usuarios en términos de calidad, cobertura y precios de los servicios.