18 de julio para no olvidar

Cada país con sus costumbres y, sin duda Colombia, no deja de sorprenderme porque aparentemente funciona al revés que los demás países.

Como se debe recordar, dos terceras partes no votaron y la mitad del tercio que votó se expidió por el NO a la paz. A “esa paz” dicen para justificarse como si la paz tendría alternativas.

A los ladrones y asesinos que aprisionan, que se estima es la minoría, los liberan porque no hay suficientes cárceles para retenerlos. La violencia y la impunidad van de la mano.

Hoy me doy cuenta que el débito automático de los servicios, al que firmé voluntariamente para evitar tener que hacer colas en los bancos es cobrado el día de la emisión de la factura (14 de julio) mientras que el pago de la factura física en el banco tiene plazo hasta el 21 de julio. En los países que yo considero normales precisamente los débitos automáticos gozan de unos días más de crédito.

Hoy cumple años Quino y van mis felicitaciones. Que hubiese dicho Mafalda en estos casos.

Paren al mundo, quiero bajarme

Hoy es el aniversario del atentado de la AMIA (Asociación Mutual Israelita Argentina) en Buenos Aires en 1994, y es otra razón para bajarse del mundo.

Es el único mega atentado en el mundo que aún se sigue investigando después de 23 años y tal como extraigo de un texto: Después de 23 años del atentado de la AMIA, el ataque más brutal que haya sufrido Argentina, Lutzky consideró que “lo único que se sabe es que la Justicia, el ex presidente Carlos Menem (1989-1999) y la Inteligencia encubrieron la verdad”.

De hecho, Menem; el primer juez de la causa AMIA, Eduardo Galeano; y el secretario de Inteligencia de aquella época, Hugo Anzorreguy, irán a juicio oral por encubrimiento del ataque.

Trabajé 5 años en el edificio de la AMIA y no puedo hacer más que protestar por medio de este medio.