Resulta por lo menos absurdo que quienes han tenido acceso a mayor educación más confundidos estén y, por supuesto, sean sujetos más fáciles de enculturar por el marketing, que si bien es clave que siempre ha sido así, ahora lo es más con el marketing político.
Durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, para distraer la atención del pueblo crearon el famoso “Chupacabras”. Éste era temido en todo el país y en las rancherías daban testimonio de su aparición y los daños que causaba al ganado, vaya, una especie de vampiro que no se tenía la certeza si podía llegar a atacar a las personas. La televisión mexicana sacaba escenas que supuestamente la gente enviaba, ya fueran fotos o videos. La idea a mí me pareció genial, aunque fue detestable el hecho de distraer a la gente de los problemas por los que nuestro país atravesaba en ese momento.
Hoy el nuevo “Chupacabras” se llama Andrés Manuel López Obrador, que como decía José Agustín Ortiz Pinchetti, sólo falta que le inventen que se desayuna niños crudos por las mañanas.
AMLO es el único de los contendientes actuales al que se le ha buscado por cerca de 18 años algún acto de corrupción, propiedades o dinero y ¡no le han encontrado absolutamente nada!
La campaña del miedo está a todo lo que da, a quienes más amenaza es a la clase media y media alta, los de clase alta saben que México no puede ser otra Venezuela, y los de clase media baja y baja no tienen nada que perder. Hace unos días escuché que si ganaba el Peje, la gente perdería su trabajo y esa gente no sabe o bien ha olvidado que cuando este personaje fungió como Jefe de Gobierno del D.F., fue cuando más empleos se generaron y, por cierto, cuando mayor inversión existió, con ello las cifras de inseguridad bajaron substancialmente. Además de amenazar a quienes han vivido pegados al poder político y a la corrupción, López Obrador es una figura distractora de los graves problemas que México está sufriendo.
Los que no quieren que llegue a la Presidencia de la República, puede ser que simplemente no les simpatice, pero hay otros que ya rayan en el odio desatado por sus contrincantes a través de los muchos medios de comunicación; ahora resulta que los más estudiados han sido convertidos en ignorantes.
Las campañas todavía no empiezan y los ataques son incesantes. Para actuar como verdaderos ciudadanos es necesario ser fríos en nuestra decisión de voto, dudar todo el tiempo de todo lo que se dice, a menos que sepamos personalmente que es verdad o mentira.
La actual campaña del miedo, no hará más que quienes no pensaban votar salgan a las urnas enojados por los ataques al personaje con el cual se identifican.
@fschutte
Estimado Fernando,
Encuentro tu editorial de gran fondo y con un contenido que da mucho que pensar y sobretodo motivante para salir a votar. NO A LOS ATAQUES..! Ya estamos hartos… Hay que construir.. México es mas grande que esto. Felicidades.
Gracias Mr. Petit!