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El inhumano uso electoral de la vacuna

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La llegada de la vacuna a México significa esperanza para gran parte de la población. Y es que además de inmunizar organismos, el remedio es un paso más para la reapertura de actividades económicas y laborales. No obstante, es inhumano que el Gobierno Federal vulnere el derecho universal a la salud por medio del uso electoral de las dosis contra la COVID-19. 

A través de la centralización de vacunas, la participación de los “servidores de la nación” y ahora la toma de fotografías y uso de credenciales electorales, la autollamada Cuarta Transformación ha dejado ver intereses que van más allá de salvar vidas. Esto, con todo y que la pandemia ya dejó más de 2 millones de personas infectadas y arriba de 175 mil defunciones. 

El pasado 15 de febrero arrancó la vacunación contra el virus SARS-CoV-2 en personas mayores de 60 años. Además de las fallas logísticas, resultó extraño que en algunos lugares los coordinadores del proceso tomen fotografías a los beneficiados y soliciten hasta copias de la credencial de elector y la CURP.

Sobre el tema, durante la conferencia matutina de este 17 de febrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó cualquier fin electoral en la distribución de las vacunas. Incluso, calificó de “ofensivo” que se crea que su administración es igual a la de las anteriores. 

“Es otro gobierno, no somos iguales a los anteriores. Realmente es hasta ofensivo que nos comparen. Nosotros venimos de una lucha democrática que se opone a la manipulación y uso de los programas sociales con propósitos electorales”, dijo el funcionario. 

Aunque el primer mandatario aseguró que sólo se trata de un trámite, existen algunas otras señales que hacen sospechar de su actuar. Tan es así que Movimiento Regeneración Nacional (Morena) rechazó un punto de acuerdo cuyo uno de sus objetivos consistía en que el Instituto Nacional Electoral (INE) vigile una estrategia de vacunación limpia ante los comicios del próximo 6 de junio. 

Presidente López Obrador en conferencia de este 17 de febrero. Fuente: Cuartoscuro.

Morena frena punto de acuerdo contra fines electorales de la vacuna 

Pese a que la actual gestión presume ser un equipo sin nada que temer, el pasado 27 de enero, Morena ganó en votos y se salió con las suyas. Resulta que la  Comisión Permanente del Congreso de la Unión desechó un punto de acuerdo que incluía un llamado al INE a fin de que supervisara el no uso electoral de la inmunización en el país

Asimismo, los morenistas y sus aliados consiguieron que quedara fuera un exhorto con el fin de exigir al Gobierno Federal transparencia en los contratos de las vacunas antiCOVID-19. La eliminación del proyecto ha facilitado que hasta la fecha, los mexicanos dependan exclusivamente de los datos, cifras y fechas provenientes desde Presidencia y su Gabinete. 

Con lo anterior, lo que pudo ser un llamado a la rendición de cuentas se convirtió en una solicitud pasada al archivo. La diputada Dulce María Sauri Riancho, presidenta de la Mesa Directiva, calificó al expediente como concluido y entonces finalizó el asunto.

 

Vacunación de adultos mayores en la CDMX. Fuente: Cuartoscuro.

Centralización de vacunas 

Con aplausos hacia López Obrador por el llamado que hizo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a fin de que se garantice el uso universal de la vacuna, el Gobierno Federal ha centralizado la distribución de dosis contra el coronavirus. En este sentido, dejó fuera de la estrategia a las administraciones locales y estatales.

A pesar de que la Política Nacional de Vacunación reconoce que cada entidad tiene un comportamiento epidémico distinto, la autollamada Cuarta Transformación prefirió hacerlo todo desde el centro. De dicha forma, inició a andar los llamados “operativos correcaminos” conformados por personas no del todo capacitadas. 

La estrategia de vacunación prefirió utilizar el servicio de 30 mil “servidores de la nación” —quienes ya recibieron la vacuna— a las instituciones de salud de cada entidad federativa. De hecho, los gobernadores que conforman la “Alianza Federalista” se han pronunciado a favor de colaborar en el proceso, sin tener respuesta alguna. 

También, cabe señalar que aunque el primer mandatario autorizó que los gobiernos locales y organismos privados adquieran la vacuna antiCOVID-19 por su cuenta, las empresas farmacéuticas no tienen disponibilidad. Tal situación hace que cada demarcación esté a expensas del avance federal. 

“Servidores de la nación” encabezan vacunación 

Pese a que el mismo presidente de la República ha negado el uso electoral de la participación de los “servidores de la nación” en la estrategia de la vacunación, es casi imposible separarlos de su origen. Y es que estas figuras surgieron en el año 2018 después de que promovieron el voto a favor de AMLO.

Actualmente, el ejército de este grupo tiene la misión de recorrer el país y repartir los programas sociales. Sin embargo, se les ha criticado por parecer mensajeros de López Obrador en lugar de difundir únicamente un proyecto gubernamental. 

De cualquier forma, son los “servidores de la nación” quienes con su chaleco color guinda registran a los adultos mayores. En la repartición de dosis contra el coronavirus, suman a las razones que ponen en tela de juicio las acciones gubernamentales. 

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“Servidores de la nación” en vacunación de adultos mayores. Fuente: Cuartoscuro.

Finalmente, cabe esperar que la vacunación se realice de forma universal y con una velocidad mucho mayor. Esto, a tal grado de que el próximo 6 de junio no se consolide un intercambio entre votos y dosis. 

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