Los conductores refirieron no sentirse muy seguros con la infraestructura del STC Metro. Además, hacen un llamado a las autoridades para que pongan más atención a todo el sistema y se eviten futuros accidentes.
Ciudad de México (elsemanario.com).- En entrevista para un noticiero de radio, Fernando Israel Rosales, quien impactó el tren que conducía Rodrigo Pascual Martín, expresaron aún malestares en el cuerpo tras los sucesos acaecidos el 4 de mayo en la estación Oceanía de la Línea 5 del metro capitalino.
Rodrigo Pascual, quien operaba el tren que fue impactado, mencionó que al salir de la estación Oceanía, aproximadamente 80 metros, alcanzó a ver una lamina, que desconoce de dónde o cómo apareció, pues el granizo y la lluvia impedían la visibilidad. El objeto obstruía la vía y el piloto del tren 05 mencionó que frenó para no dañar el tren, pues “por protocolo se debe detener el tren para evitar daños”.
Posteriormente pidió corte de corriente al Puesto Central de Control, pero no recibió respuesta, ya que “la comunicación estaba anunciada como mala a partir del día 3 de mayo”.
Acto seguido, el conductor cuenta que recibió el impacto “como una explosión”. Después de perder el equilibrio caminó por las puertas de intercomunicación. Recuerda que ya en la estación, personal del sistema ya estaba desalojando los carros del tren. Posterior al siniestro, los conductores fueron trasladados a Pantitlán, en donde se les practicaron pruebas de alcoholemia, una por parte de la jefatura de transportación y otra por la Coordinación de Seguridad Industrial e Higiene.
Por su parte, Fernando Rosales informó que desde que salió de la estación Pantitlán solicitando sus “condiciones de línea”, no se le dieron, lo que ocasionó que saliera como se le marca en el pilotaje automático, al no haber otra indicación. Así, abandonó la estación Pantitlán con PA (Pilotaje Automático).
Al llegar a Terminal Aérea y no encontrar nada fuera de lo normal en su cofre de marchas, continuó en pilotaje automático.
Al salir del túnel hacia “lo que es la loma”, menciona, en “la techumbre”, es el momento en el que el conductor se encuentra con la cortina de lluvia acompañada de granizo. El piloto del 04 cuenta que intentó poner su limpiaparabrisas, “el cual no funciona”, y tuvo que continuar a ciegas con el PA.
El piloto también recuerda que no detuvo el tren antes porque la pendiente es muy elevada; de hacerlo, el tren pudo haber regresado, lo que pudo haber provocado otro accidente con el tren detrás de él.
Por el peso del tren y el mismo peso de los usuarios, el tren comenzó a deslizarse y en la parte de “la techumbre”, que para agregar más desperfectos, se encuentra rota, el piloto se enuentra nuevamente con una “cascada impresionante” que cae en la barra guía D y la pista de rodamiento D, lo que provocó que el tren se patinará con mayor fuerza.
La cascada referida por el conductor sirvió “como mantequilla” para que se patinara con mayor fuerza el convoy que posteriormente impactaría el de Rodrigo Pascual. Fernando Rosales señala que al ver el semáforo en verde, es decir, la señal permisiva que indicaba que su compañero ya había salido de la estación Oceanía, trata de controlar el tren con el frenado, pero no lo logra; sale del techado y se encuentra con la lluvia y granizo, mismo que no le permitió ver la señal de entrada sino hasta que ya era demasiado tarde. Al visualizarla en rojo, el conductor pidió el corte de corriente. Para ese momento el tren ya se deslizaba. El conductor menciona que el corte de corriente no hubiera ayudado mucho, pues por la velocidad y el peso del tren, no se hubiera detenido.
Al ver que el tren de Rodrigo Pascual no había salido de la estación, solicitó tres veces más el corte de corriente, y al notar que no lograba detener el tren por ningún medio, los cuales agotó para poder lograrlo, y al verse invadido por la colisión inminente, “ahí es cuando ya decido salvaguardar mi vida y me aviento hacia el anden”.
Los trabajadores hacen un llamado a las autoridades, pues se sienten, afirman, “no muy seguros” porque el mantenimiento al 100 por ciento no se ha logrado. Rosales menciona que a ellos sólo les entregan el tren para conducirlo, pero desconocen si el mismo se encuentra en condiciones óptimas para su servicio.
También señalaron que el tren 05, era de los trenes recuperados, es decir, “de los que tenían en los garage” para los que “supuestamente no había refacciones”.
“Que se ponga más atención a todo el sistema” del metro, a “comunicación, mantenimiento de trenes para evitar otros posibles accidentes”, mencionaron. Y también aseguraron que no tienen fecha para su regreso a laborar, aunque “necesitamos seguir trabajando, pues tenemos familia”.
Mañana se dará a conocer el reporte por el Comité de Incidentes Relevantes.