Debido al efecto inflacionario que se ha presentado desde hace 5 meses, el Banco de México (Banxico) decidió aumentar en 25 puntos base la tasa de interés.
Ciudad de México – Con solo un voto en contra la Junta de Gobierno del Banxico, indicó que la tasa de interés interbancaria a un día se estableció en 7 por ciento, con lo cual busca frenar las presiones sobre la inflación, que tocó un máximo de casi ocho años y medio en la primera quincena de junio, y siguiendo un alza de tipos en Estados Unidos.
Cabe destacar que la misma Junta prevé que el ciclo de alzas en la tasa de referencia llegue a su fin pronto, así mismo, prevé bajas para finales de año.
Banxico dijo en su comunicado que con la nueva alza la tasa de referencia es congruente con el proceso de convergencia de la inflación hacia el objetivo de un 3.00 por ciento, más o menos un punto porcentual.
“Se anticipa que, si bien en 2017 la inflación se ubique considerablemente por arriba de la cota superior del intervalo de variación del Banco de México, durante los últimos meses de este año y todo el próximo retome una tendencia convergente hacia el objetivo de 3.00 por ciento y alcance dicho nivel hacia el cuarto trimestre de 2018”.
Al respecto Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody´s Analytics, consultado por Reuters comentó lo siguiente: “Todavía es muy prematuro hablar de un final del ciclo alcista de las tasas de interés, sobre todo porque hoy (jueves) en la mañana se dio a conocer que la inflación subyacente continúa subiendo”.
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La Junta de Gobierno de Banxico dijo que, hacia adelante, vigilará el traspaso potencial de las variaciones en el tipo de cambio y de incrementos en los precios de los productos energéticos.
Además, señaló que seguirá evaluando la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos.
Banxico aclaró que se evaluarán los incrementos en los precios de los energéticos al resto de los precios, así como a la evolución de la brecha del producto, además de la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos.
De esta manera, el banco central elevó su tasa objetivo por séptima ocasión consecutiva, la cual acumula un incremento de 400 puntos base o 4.0 por ciento desde diciembre de 2015, cuando se ubicó en un nivel mínimo histórico de 3.0 por ciento.
