Para adquirir la canasta básica se requiere de un ingreso mensual de 6 mil 403 pesos, sin contar los gastos en servicios básicos.
Los 7.8 millones de trabajadores que actualmente ganan el salario mínimo tendrían suficiente dinero para comprar una canasta alimentaria hasta el año 2044, si el ritmo de incremento salarial anual continua como hasta ahora, advirtió la UNAM.
Un informe del Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), citado por Sin Embargo, destaca que el poder adquisitivo del salario mínimo se ha reducido 11.11% durante el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
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Los precios de los productos básicos, sin embargo, han aumentado un 26.9% y aunque las horas de trabajo han aumentado, los trabajadores que perciben salarios mínimos difícilmente pueden costear una canasta básica en el país.
El reporte destaca que de los 51 millones ocupados, 32 millones perciben de uno a tres salarios mínimos, de 2 mil 401 pesos a 7 mil 203 pesos mensuales. Pero las mediciones reportan que para adquirir la canasta básica se requiere de un ingreso mensual de 6 mil 403 pesos, sin contar los gastos en servicios básicos.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo muestra sin embargo que sólo 3.1 millones obtiene más de 12 mil pesos mensuales.
“La clase trabajadora mexicana enfrenta una situación generalizada de precarización que se expresa en el deterioro de los niveles de vida de las familias mexicanas y tienen que trabajar más tiempo para intentar nivelar su consumo”, explica el estudio del Centro de Análisis Multidisciplinario, según cita Sin Embargo.
La fuente destaca que desde que inició la administración del presidente Peña Nieto hasta el 16 de octubre de 2016, el salario mínimo ha aumentado 12.8% en términos nominales. No obstante, por efecto del aumento de 26.9% de los precios de productos básicos, los incrementos nominales al salario mínimo se han convertido en pérdidas del poder adquisitivo del mismo, confirma el informe.
“Desde la década de los 80 de forma ininterrumpida se ha presentado una impresionante caída del poder adquisitivo de casi un 80 por ciento y esto afecta negativamente las posibilidades que tiene la población mexicana de acceder a una buena calidad de vida”, se advierte en el estudio.
