Una vez hecha la evaluación del desempeño de los colaboradores, los líderes, directores y gerentes de equipo deben planificar de manera estructurada y consistente la sesión de retroalimentación.
Ciudad de México – La recta final del 2017 está iniciando y para la función de Recursos Humanos llega también una etapa en la que la evaluación del desempeño va de la mano del balance indispensable acerca de los retos, las acciones y los logros alcanzados en el año.
“Todas las organizaciones llevan a cabo un balance de resultados que facilita la evaluación de los resultados, las pérdidas y ganancias, la efectividad y la rentabilidad. Tratándose de personas, en la gestión del talento, este es un proceso indispensable para impulsar la mejora continua”, asegura el Lic. Pedro Borda Hartmann, Director General de la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos.
Al respecto la Amedirh reconoció que una de las tareas más importantes del área de recursos humanos es reconocer la labor de los colaboradores de la empresa, por lo que al realizar una evaluación del desempeño de cada uno es importante dar espacio a la retroalimentación.
De acuerdo con un estudio publicado en el Harvard Business Review, la comunicación en general produce que el nivel gerencial experimente algún grado de incomodidad al interactuar con los empleados.
“Esta es una práctica relevante para la gestión de talento porque representa justo el momento en que se rinden cuentas comparando los planes de trabajo establecidos, con los resultados alcanzados”, explica Borda Hartmann.
En la situación específica conocida como brindar retroalimentación u orientación para la mejora del desempeño de los colaboradores, se llega a generar una emocionalidad similar a la falta de confort en al menos el 37 por ciento de los ejecutivos según el reporte publicado por Lou Solomon, la CEO de Interact, consultora de comunicación que apoya a CEOs de empresas de la lista Fortune 500.
“Compartir con un colaborador el reconocimiento a los éxitos siempre resultará más agradable que compartirle la necesidad de que mejore sus resultados, que reoriente sus comportamientos o que desarrolle habilidades nuevas. Esto se agudiza, especialmente, porque la evaluación del desempeño suele estar relacionada con incrementos salariales, el acceso a beneficios flexibles o promociones dentro del plan de vida y carrera”, explica el directivo de Amedirh.