La oportunidad para México
¿Existe una oportunidad para la consciencia dentro de la política en México? Normalmente la mayoría hemos visto la política desde el eje de las “x”, donde los diferentes partidos se posicionan como de izquierda, derecha, centro o una mezcla de estos según las ideologías de cada uno.
Dentro de este espectro político pueden existir diferentes ejes polarizados de acuerdo a ideas, sistemas o formas de gobernar. Sin embargo, gracias al cambio político que estamos viviendo en México y el mundo, hoy se abre la posibilidad para observar uno que nos permita entender mejor desde dónde es que estamos llevando el cambio. Estoy hablando del eje de la consciencia que se polariza con su opuesto; el ego.
El historiador Yuval Noah Harari apunta en su reciente libro “21 lecciones para el siglo 21” que en 1938 existían tres ideologías: fascismo, socialismo y liberalismo. En 1968 bajó a solo dos (socialismo y liberalismo). En 1998 bajó a una, liberalismo. Pero ahora en el 2018 bajó a cero, sin ideología, sólo el puro Yo-Yo-Yo. Esto nos permite observar que, con el tiempo, la política que nació para servir cambió hacia la política del ego.
¿Qué hay atrás de este gran cambio de gobiernos en el mundo? La mayoría responderíamos de forma inmediata desde el eje de derecha-izquierda; sin embargo, hay algo más profundo que ha sido el contexto que se fue articulando en nuestro inconsciente y que respondió como reacción masiva a estos cambios: el abandono.
México se siente abandonado. Aun y que se hayan implementado programas de educación, desarrollo social y económicos, pudimos observar que en su mayoría fueron utilizados para la ganancia política. Se diseñaron desde un poder ejercido inconscientemente, sin un propósito real que permitiera un cambio hacia un resultado de mejora colectiva.
Si observamos el abandono desde la autoreferencia, podemos ver que esta historia de inconsciencia política, la fuimos creando y acompañando desde la inconsciencia ciudadana. Desde los miedos y la ambición que nos polarizan a los ciudadanos y que con ello creamos el poder, nos fuimos separando en la educación, la economía y la calidad de vida ‒entre otras cosas‒, abriendo el paso a que este abandono se fuera presentando y, con el tiempo, nos fuimos acostumbrando a vivir de esta manera. Como sociedad nos separamos. Alimentamos al ego junto a nuestros líderes políticos en vez de alimentar la consciencia.
Nos hemos tardado muchos años para construir todo esto que hoy no nos gusta, por lo tanto, no será suficiente un sexenio para resolverlo. Esto es el primer acto de consciencia que es necesario asumir si queremos empezar un cambio. Es importante que todos nos unamos a un gran propósito para México y evolucionar de un ego-sistema que nos mantiene ausentes a un eco-sistema que nos hace presentes.
Nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha propuesto una Cuarta Transformación. Aunque nuestra polarización actual nos divida en lo que cada parte cree coherente o no de esta visión, es una oportunidad para nuestro país si nos sumamos y participamos para que este cambio de consciencia colectiva inicie en el nuevo sexenio, sumándonos a este esfuerzo de transformación.
Como lo he mencionado en mis otros artículos, esto empieza desde lo individual hacia lo colectivo. Es romper el ego y acercarnos unos a otros. Es saber que podemos entre todos ser los creadores de la próxima versión de México; la que puede dar paso a una serie de cambios para que nuestra consciencia colectiva nos permita evolucionar sin abandonar a nadie, aprovechando los potenciales de nuestro país y de todos los mexicanos.
Por supuesto que AMLO no la tiene fácil, aunque así parezca cuando lo comunica. Él lo sabe, pero requiere darle un motivo a los más abandonados para crear certidumbre y generar esa inercia que se necesita de un país para que puede rescatar su voluntad e iniciar la próxima transformación.
Será importante tener presente que cuando pasamos por un proceso de cambio, no podemos esperar que todo nos guste. Hagamos lo que debemos hacer cada uno conscientemente para que poco a poco las decisiones de nuestros líderes políticos sean un reflejo de nuestras causas colectivas. Esto sucederá sólo si soltamos el eje de las ideologías y pasamos al eje de la consciencia.
Una ideología es una colección de ideas y creencias que te posicionan en algún punto de cualquier eje temático. Querer tener la razón de nuestras ideas sin estar abiertos a otras nos deja en el polo del ego. ¿Estás preparado para soltar tu ideología y fluir con un propósito colectivo?
El título del artículo es muy atractivo y genera grandes expectativas…. y las cumple generosamente.
Felicidades desde el eje de la consciencia!
Saludos
EZ
Gracias por tus comentarios Esteban,