Poco a poco nos hemos ido enterando de cuáles son los planes para la Salud de nuestro nuevo gobierno. Primero, vimos en una ceremonia, que reunió al presidente de la república con su gabinete de Salud, cómo se declaraba que el plan para atender a los habitantes sin empleo fijo, el Seguro Popular, sería cancelado, cuando menos en los estados del Sureste, la idea es que paulatinamente va irse cerrando con una cuarta parte de los Estados restantes, hasta que en dos años desaparezca. La Secretaría de Salud emitió una propuesta que parece más una declaración de intenciones que un verdadero plan de trabajo. Emite la intención de mejorar los servicios, atender las urgencias y dotar de los medicamentos necesarios a todos los que lo necesiten. Mucho se insistió durante las declaraciones en que el Seguro Popular había fallado porque en los estados se había incurrido tanto en deficiencias como en deshonestidad, al ejercer inadecuadamente los fondos de que estaba dotado. Vieja historia de una federación; considero que si los fondos deben ejercerse de manera central o desconcentrada, me parece que el simple cambio del ejercicio presupuestal a nivel central no garantiza su uso eficiente, como tampoco asegura el uso honesto.
Estando un poco en este limbo de información, en una reciente reunión del señor presidente con los nuevos directivos del IMSS, en Morelia, donde será la nueva sede del Instituto, se emitió un documento que aclara un poco más las intenciones y sus métodos para lograrlo. Se declara que el organismo paralelo del IMSS, el IMSS-BIENESTAR, nuevo apellido del IMSS-COPLAMAR, IMSS-SOLIDARIDAD, etc., será el encargado de brindar el primer nivel de atención a los no derechohabientes formales del propio IMSS, además de garantizar la atención de Urgencias y canalizar hacia unidades de segundo y tercer nivel todos los casos en que sea esto necesario.
El ahora IMSS-BIENESTAR no está, cuando menos hasta ahora, dotado con una estructura de primer nivel para atender a la población que ya tenía, menos aún a la que se le asignará. El presupuesto para Salud en 2019 se presta para algunas confusiones, los diferentes comentarios resaltan cifras variables que van de 1.7% de incremento a 3.5% de decremento, en todo caso no se avizora fácilmente la posibilidad de incrementar los recursos físicos y humanos para que el nuevo IMSS-BIENESTAR pueda mejorar su capacidad y así atender en mejores condiciones a la nueva población asignada. Nuestro país cuenta con poco más de una cama censable por cada 1,000 habitantes, el promedio en la OCDE, organización a la que pertenecemos de pleno derecho, tiene más 3.5 camas censables por cada 1,000 habitantes; por otra parte, México tiene para Salud un presupuesto de un poco menos de 1,050 dólares por habitante, mientras en la OCDE el promedio es de 3,484 dólares. Ineficiencias aparte, y desde luego criticando totalmente los casos de deshonestidad, que siempre son ampliamente condenables, pero que quizá en este tema lo son aún más, el problema de la Salud en México es fundamentalmente un problema presupuestal, que se agrava por varias causas: una, quizá la principal, es la pobreza de un gran porcentaje de la población, la enfermedad generalmente se ceba aun más en la pobreza; también hay que considerar la amplitud de nuestro territorio, aunado a que muchas poblaciones son de difícil acceso; por último, está la falta de una Política de Estado en la formación de los Recursos Humanos para la Salud.
Sin otras medidas, el cambio de ejercicio presupuestal de estatal a central, o el cambio de institución responsable de la SS al IMSS, sin modificaciones presupuestales considerables, sin mejoras en la gestión de los servicios, sin planeación de los recursos humanos, sin un sistema que haga fluir eficientemente a los pacientes de un nivel a otro, sin una definición clara del sistema en el primer nivel, ni eficientar las recursos con los que cada institución cuenta, las posibilidades de grandes cambios se ven como una tarea difícil.
Al respecto, han aparecido dos notas periodísticas importantes, una de Mauricio de María y Campos, en este mismo periódico, El Semanario. De María y Campos es un distinguido economista que ha tenido una larga carrera como funcionario público en puestos de responsabilidad y que además ha venido desarrollando una relevante trayectoria como embajador en diferentes organizaciones de la ONU. Actualmente es presidente del Centro Tepoztlán Víctor Urquidi, A. C., un sitio muy prestigiado de análisis y reflexión económica. En el escrito que compartió se concluye que las reformas del Sector Salud son bienvenidas, pero sólo en cuanto al análisis teórico, no se revisan las dificultades, las necesidades, ni los retos; por supuesto que se requieren modificaciones, la problemática está en establecer cuáles y cómo alcanzarlas. El otro texto que quiero rescatar es de Arnoldo Kraus, distinguido médico, quien además es un observador crítico de muchos fenómenos en el país. Él hace una crítica devastadora de todo lo realizado, aunque no deja una propuesta de modificación, sin embargo, con los datos que expone se podrían sacar algunas conclusiones. A pesar de los bajos recursos económicos destinados, de la carencia de recursos materiales, del déficit de los recursos humanos, se ha conseguido un sistema de salud cuando menos parcialmente eficiente.
En el propio documento elaborado por el IMSS se hacen notar algunas deficiencias del propio sistema institucional. El número de camas censables en el IMSS ha venido bajando, al incrementarse la derechohabiencia sin crecer la infraestructura, actualmente la establecen en 0.69 (por debajo del promedio nacional). En el sistema actual, en el primer nivel existe un déficit de 1,748 consultorios y, por lo tanto, de 1,748 médicos que los atiendan -en el sistema del IMSS se trata de médicos familiares-. Si la demanda se va a incrementar, al tener acceso al servicio los derechohabientes no tradicionales, el déficit será mucho mayor. El IMSS tradicional cuenta con 426,000 plazas ocupadas por personal de salud y el IMSS-BIENESTAR con menos de 27,000; por lo que esperar un servicio eficiente en el primer nivel es muy optimista. La participación del ISSSTE, y las instituciones de Salud específicas, como la Secretaría de la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina o PEMEX, en el plan global, sólo podrá ser marginal porque ya cuentan con tareas específicas que cumplen con mayor o menor éxito. Puede ser una mala señal que el ISSSTE despidió a 3,000 trabajadores esta semana, pues en una institución de su tamaño el número es muy grande; no se ha informado qué tipo de trabajadores fueron despedidos.
Desde luego que el sistema de salud requiere la atención del nuevo gobierno, pero se debe hacer tomando en cuenta los grandes retos, las enormes dificultades y las necesidades crecientes, sólo así podrán ser solucionadas. Hay que estar conscientes de que las mejoras tendrán que ser paulatinas.
Lecturas recomendadas:
https://www.eluniversal.com.mx/articulo/arnoldo-kraus/nacion/mexico-pobreza-e-insalubridad
https://www.gob.mx/imss/articulos/imss-bienestar-para-toda-la-vida
Muy bien comunicado y analizado ya va caminando poco a poco ya que no hay mucha gasolina para manejar rápido Dr Sofia Scholar
Verdaderamente se ve cuesta arriba que el sistema de salud Mexicano sea comparable al Danés, Canadiense o Inglés en 2 años. Los datos que nos presenta el Dr. Ramiro son una verdadera dosis de realidad.
Cuando se hacen las cosas al vapor, como se vienen haciendo en este gobierno, es de esperarse un colapso .
No está mal que la medicina llegue a todos Los niveles, pero destrosar lo que ya existe , es temerario.
Doctor es de lamentarse que con los anteriores gobiernos no se hubiera hecho críticas y señalamientos, como los que se exponen ahora.
Doctor en anteriores artículos ha hecho mención en lo referente al sector salud, se entiende ya que usted trabajó en instituciones públicas y conoce a fondo el problema.
Es muy pronto para emitir un juicio en lo que se refiere al nuevo gobierno y como se han visto las cosas, la deshonestidad a todas luces en todos los sectores gubernamentales y paraestatales, debido a esto se tiene que vigilar y en su caso presentar denuncias.
Por lo que se refiere al despido de trabajadores del ISSSTE, esperemos se aclaré, es que después de enterarse lo referente a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y en general al Poder Judicial, donde se dio tanta deshonestidad y corrupción, al parecer esto se está viendo en muchos sectores gubernamentales del país.
Comparto su opinión Doctor, nos encontramos frente a un reto de una magnitud impresionante.
Desde el punto de vista de operativos en el sector salud publico, hay mucha incertidumbre con respecto a las responsabilidades y a las dependencias administrativas, parece haber mas duplicación de funciones, un aumento a las exigencias en cuanto a las metas y la productividad, pero éstas no parecen estar respaldadas con presupuesto o con apoyo por parte de la autoridad.
Muy interesante Doctor!