Nueva ministra apoyada por el PAN

Lectura: 3 minutos

La votación para elegir al nuevo integrante de la Suprema Corte logró unir a la oposición y al oficialismo.

Con 94 votos a favor el Pleno del Senado eligió con mayoría calificada a Ana Margarita Ríos-Farjat como nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para los próximos 15 años.

Las otras dos postulantes Ana Laura Magaloni Kerpel registró 25 y Diana Álvarez Maury obtuvo uno. No se registraron abstenciones, pero sí dos votos nulos.

Ríos-Farjat se despeñó por más de un año como Jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT) por lo que se esperaba que sus antecedentes como servidora pública de la administración encabezada por López Obrador supusiera una traba en su designación pero la oposición, encabezada por los Senderos del Partido Acción Nacional (PAN), optaron por dar un voto de confianza a la independencia y autonomía que debe mostrar en sus resoluciones la nueva ministra.

Artículo relacionado: ¿Quién es quién en la terna?

En declaraciones retomadas por Notimex, Marko Cortés, dirigente nacional del PAN señaló que la postura tomada por su partido fue “para llevar a una ministra de la Corte que comprometió autonomía e independencia y que acredita capacidad para desempeñar dignamente el cargo. Darle un voto de confianza que será una ministra que sepa y entienda bien el equilibrio de poderes entre el Ejecutivo, Legislativo y Judicial”.

¿Quién es Ana Margarita Ríos-Farjat?

La nueva ministra, de 46 años de edad, afirmó que le espera un gran reto pero lo asume con entusiasmo;  manifestó su confianza en el máximo tribunal de la nación.

“Me espera un gran reto, lo asumo con mucho entusiasmo, es una institución en la que creo mucho, he creído en ella toda mi vida, ha hecho un magnífico trabajo, lo está haciendo y vamos a sumarnos a lo que se está llevando a cabo ahorita”, expresó.

Señaló que la SCJN es un órgano autónomo de gestión, de decisión y muy técnico; indicó que a diferencia del SAT, que también es muy técnico y en el que se desempeñó como titular de 2018 a la fecha, ahora tiene una responsabilidad social y constitucional.

“Yo no veo forma de que mi autonomía, mi criterio, mi capacidad de persona crítica se vea comprometida de modo alguno por haber aceptado una encomienda muy alta, y para mí motivo de honor. El trabajo es público, está ahí, fuera de lucubraciones y demás”.

“Yo creo en la imparcialidad. Trato de concentrarme muy bien en mi trabajo, lo he hecho en el SAT, abrimos un enorme reto, sabemos a dónde vamos, tenemos el corazón puesto ahí, y sabemos que una de las cosas que hay que hacer es cuidar la autonomía institucional y simplemente ver por la justicia que es el bien común hacia donde todos vamos”, explicó.

Al preguntarle si llega al cargo sin vínculo con la Presidencia, dijo que esa pregunta, que resulta ser como una falta de respeto a la institución, al Senado, la comprende perfectamente bien, porque es una preocupación social.

Aclaró: “trabajaba en el Gobierno Federal, era jefa del SAT, estoy presentando la renuncia, estaba con licencia, eso podría ser un vínculo en el sentido de que yo he sido parte de las autoridades fiscales mexicanas.

“Pero fuera de eso no veo que haya algún problema con la autonomía; mi trabajo es público, seguirá siendo público, y lo que puse a consideración del Senado es mi expediente de vida que no nace a partir del SAT, sino viene de atrás, de muchos años como profesionista independiente, como abogada, como funcionaria que fui hace muchos años en el Poder Judicial de la Federación”.

Con información de Notimex.

0 0 votos
Calificación del artículo
Subscribir
Notificar a
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
0
Danos tu opinión.x