Presupuesto de Egresos 2021 y el recorte a los estados: retos y realidades
En medio de la crisis sanitaria sin precedentes que ha paralizado las actividades productivas en todo el país, los estados y municipios se enfrentan a un nuevo reto con la reducción a sus ingresos establecido en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación que, manteniendo su línea de austeridad en 2021, castiga uno de los bastiones del presupuesto para las entidades federativas.
“Ahora (los estados y municipios) tienen un problema serio porque, primero los ingresos petroleros bajaron, se han reducido de manera significativa y además hay toda una orientación para refinar, no para vender, la renta petrolera no va a ir orientada a obtener ingresos presupuestales sino a refinar. Esto obliga a los estados a ser un poco más racionales,” señala Sergio Ampudia Mello, Presidente del Consejo Directivo del Grupo Promotor de la Cámara Nacional de la Industria Energética.
El duro golpe que han recibido los estados y municipios viene de la reducción del 6.4 por ciento establecido en el Presupuesto de Egresos 2021 para el Ramo 28, lo que reduce los ingresos de gobiernos estatales en un 5.5 por ciento.
Si bien las entidades federativas siempre han estado muy castigadas en sus presupuestos, salvo en tiempos de auge petrolero, ahora tienen que enfrentar un serio reto que los obligan a replantear sus gastos, tomar decisiones más racionales y buscar opciones que incrementen su liquides.
El panorama no permite suponer que el 2021 será un año fácil para los gobiernos locales. Los estragos de la pandemia del COVID-19 se agudizarán en los próximos meses y las prioridades del Gobierno Federal se imponen en la distribución del gasto.
Pareciera que con la decisión de Hacienda a los gobernadores se les cierra el camino; sin embargo, existen algunas opciones que podrían considerar. En entrevista con El Semanario, Sergio Ampudia Mello recordó la propuesta que el Presidente Andrés Manuel López Obrador hizo a los gobernadores sobre la reestructuración de sus deudas “de tal manera que puedan obtener como fuente de repago algunos ahorros de las deudas históricas que tienen tanto estados como municipios.”
“Yo creo que hay una solución ahí en la reestructuración de adeudos, para obtener liquides que les pueda servir para atender otras cosas,” apuntó.
La crisis energética, un problema gordo para los estados
Si bien la pandemia del COVID-19 arroja retos a vencer y obliga a los estados y municipios a tomar medidas urgentes para combatir y contener la propagación del virus, otros factores llaman la atención y encienden focos rojos principalmente en los estados de la frontera norte de México.
“Al final del día el segundo componente de presión para la Hacienda municipal y estatal es la energía y CFE no tiene la capacidad de entregar energía asequible y barata, van a tener que enfrentar sus problemas como puedan,” estimó Ampudia
El también Vicepresidente en Derecho Energético y Sustentabilidad de la Comisión Jurídica de la CONCAMIN destacó que los gobiernos locales deberán desarrollar agendas estatales que les permitan resolver sus problemas y ahorrar en otros conceptos, especialmente en caso de energía. “Yo creo que el anuncio es que cada quién se rasque con sus propias uñas.”
Para el experto en derecho el Gobierno Federal no midió los riesgos que una reducción al Ramo 28 implicaría para los estados y municipios, conformando un Proyecto de Presupuesto de Egresos basado en nociones de austeridad numérica sin planteamientos cuantitativos. “Por supuesto, en los problemas de energía yo creo que ni siquiera está en el escenario de consideración de la secretaría de Hacienda. Creo que simplemente desconocen que este elemento es vital para las entidades federativas y las entidades federativas ya que están oponiendo a política de energía de la federación,” apuntó.
“Se va a volver interesante, salvo sin duda en los estados del sureste mexicano que son esencialmente petroleros, los del norte van a tener que empezar a resolver sus problemas con base en inversiones y decisiones en donde participe el capital privado, es la única forma de resolverlo a pesar de que la política energética plantee otra cosa,” añadió.