Mantener precios artificiales de gasolina costaría 200 mil millones de pesos: Meade

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El secretario de Hacienda y Crédito Público defendió el aumento a los precios de las gasolinas explicando que el “gasolinazo” en México fue menor que en otros países, y que de no ajustarse ahora habría perjudicado las finanzas públicas a largo plazo.

Ciudad de México.- José Antonio Meade Kuribreña, secretario de Hacienda y Crédito Público, explicó que los precios de los combustibles se ajustan a la alza como reflejo del aumento en los precios del petróleo y la necesidad de acabar con los precios artificialmente bajos.

“Agradezco la oportunidad de conversar por esta vía. Siempre estaremos abiertos al diálogo”, dijo el secretario a través de su cuenta de Twitter, quien ofreció contestar a cualquier duda etiquetada con el hashtag #ConversaConJoseAMeade.

Entre sus respuestas, mencionó que mientras en el resto del mundo el “gasolinazo” fue de 25 por ciento en el último año, en México el ajuste promedio fue de 14 por ciento.

Un estudio comparativo realizado por Bloomberg arrojó que a pesar de tener precios más bajos, los consumidores mexicanos pagan más por un litro de gasolina, como porcentaje del salario mínimo, de lo que se paga en otros países, así que en realidad es relativamente más cara.

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En relación a su impacto sobre la inflación, Meade se limitó a decir que “sí habrá impacto y se ubicará en los rangos previstos por el Banco de México (Banxico)”.

Diversos analistas han estimado que al cerrar el año la inflación podría alcanzar el 5.0 por ciento, rebasando la meta fijada por Banxico establecida en 3 por ciento más o menos 1 punto porcentual.

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El funcionario explicó también que el incremento a los precios de los combustibles “se hizo ahora porque nuestro modelo hacía imposible mantener precios artificiales. Costaría este año 200 mil millones de pesos”. Mantener el precio artificial se ha hecho a costa de las finanzas públicas.

Respecto a los impuestos sobre las gasolinas, se le cuestionó la razón por la que estos no disminuían, Meade recordó que el impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) es un impuesto fijo, de manera que para este año su proporción con respecto al precio por litro se redujo del 26 al 22.9 por ciento, respecto a 2016, por lo que es uno de los más bajos a nivel mundial.

Además, reveló que el precio por litro se compone en un 36 por ciento de impuestos. Otro 51 por ciento corresponde a costos de producción, y el 13 por ciento restante a costos de logística.

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Por otro lado, dijo que los beneficios de esta acción se verán en el mediano y largo plazo en términos de inversión y libre competencia, y aclaró que el previo modelo era insostenible, ya que el mantener los precios artificialmente bajos le costó al país en 2011 más de 196 mil millones de pesos.

Esto, indicó, les impidió invertir en infraestructura, por lo que los beneficios de la liberalización y una baja en los precios se darán en el largo plazo, pues “precisamente, con la reforma energética se detonarán las inversiones para fomentar la producción doméstica” que asegure cubrir en mayor medida el consumo interno sin recurrir a la importación de combustibles.

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