El gobierno de Estados Unidos anunció su plan de reforma fiscal que incluye recortes impositivos a empresas y personas físicas para incentivar la inversión.
La nueva administración en La Casa Blanca busca aplicar el “mayor recorte de impuestos” en la historia de Estados Unidos y para lograrlo adoptará medidas que reduzcan el techo del cobro de impuestos sobre la renta del 39.6 al 35 por ciento.
“Vamos a recortar los impuestos, especialmente para la gente de la clase baja y media”, afirmó el asesor económico de Donald Trump, Gary Cohn.
En relación a los impuestos a las corporaciones, pequeñas empresas y asociaciones; el represente del gobierno de Trump indicó que se pretende una reducción a 15 por ciento.
Con la intención de repatriar a las empresas estadounidenses que han establecido plantas productoras en el extranjero, se pretende imponer un impuesto a las ganancias millonarias que las empresas generan fuera del país.
Para incentivar la inversión interna, el plan fiscal de Trump propone eliminar un impuesto sbre las inversiones netas de 3.8 por ciento que se aplicará a las personas que perciban ingresos superiores a los 200 mil dólares anuales, además de eliminar el impuesto al patrimonio que actualmente se aplica a propiedades con valor mayores a los 5.49 millones de dólares para individuos y 10.98 millones para bienes de pareja.
Dejan fuera el impuesto fronterizo
El plan fiscal de Trump no hace, hasta el momento, mención a la inclusión de un impuesto fronterizo que en su momento propuso Paul Ryan y que Donald Trump mencionó como opción para obligar a México a pagar el muro.
Gary Cohn tampoco hizo mención a la variación de tarifas impositivas que la renovación del TLCAN podría causar ni se refirió a las políticas de comercio exterior del gobierno de Trump; temas fundamentales para México.
Previo al anuncio del plan fiscal, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steve Mnuchin, adelantó que el plan para la reducción de impuestos más grande de la historia de Estados Unidos, reducirá la tasa tributaria de las empresas a un 15 por ciento, incluyendo a los pequeños negocios y añadió que existe un acuerdo fundamental entre la administración del presidente Donald Trump y el Congreso sobre los objetivos de la reforma tributaria.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, dijo que había dado un vistazo previo al plan.
“Nos gusta mucho, nos pone en la misma página, estamos de acuerdo en un 80 por ciento y sobre el restante 20 por ciento estamos en la misma cancha”, dijo Ryan
