Si bien este es uno de los ingresos más importantes para el país, las remesas procedentes de Europa se fortalecen en los últimos años.
Ciudad de México.- Cuando hablamos de envíos de dinero del extranjero por parte de connacionales, lo primero que viene a la mente son los realizados desde los Estados Unidos, pero las remesas procedentes de Europa a México se fortalecen en los últimos años y han sido una fuente importante para el crecimiento de este sector.
Las remesas han sido uno de los motores de la economía mexicana ya que impulsan el consumo interno y el desarrollo regional, al tiempo que para junio de este año, el Banco de México (Banxico) informó que estos envíos de dinero sumaron 2 mil 417 millones de dólares, la cifra histórica más elevada para un mes similar.
Pero de acuerdo al organismo Eurostat, las remesas procedentes de Europa se fortalecen en los últimos años y entre 2102 y 2015, pasaron de 85.8 millones a 93 millones de euros (unos 110 millones de dólares).
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Así, los países de la Unión Europea desde donde salió el mayor flujo de remesas a México son España y el Reino Unido, sin embargo, no es posible saber la cantidad exacta ya que estos datos no están disponibles para el público, señaló este organismo europeo.
De acuerdo a Olaf Nowak, analista de Eurostat, “los datos de los principales países de origen de los fondos enviados son confidenciales y han sido usados únicamente para calcular el valor agregado de la UE”.
Lo que queda comprobado es que las remesas procedentes de Europa se fortalecen en los últimos años y esto se vio reflejado entre 2012 y 2013, cuando la incertidumbre financiera golpeó a ese bloque de países comunitarios y por este motivo, bajó de manera general el flujo de envíos al extranjero.
Sin embargo, según cifras de Eurostat que retoma Notimex, en ese mismo periodo las remesas efectuadas por mexicanos aumentaron 1.9 millón de euros, para ubicarse en 87.1 millones de euros (uno 103 millones de dólares) para finales de 2013.
De esta manera, estos recursos han fortalecido a la economía nacional, colocando a México como el cuarto principal receptor de remesas de sus inmigrantes a nivel global, según cifras del Banco Mundial.
