La seguridad biométrica evitará robos de identidad y fraudes bancarios en México y será una manera más segura de garantizar a los usuarios que sus datos y recursos están protegidos con la identificación de huellas dactilares, iris ocular o identificación facial, herramientas con las que buscan reducir estos delitos y dar un paso hacia la implementación de sistemas avanzados en el sistema financiero.
Ciudad de México.- La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) dio un paso adelante en materia de seguridad al determinar en agosto de este año, que todas las instituciones financieras en México deberán contar con sistemas biométricos para identificar a sus clientes y reducir así la posibilidad de fraudes y robo de identidad.
Según explicó la CNBV en su momento, se ha detectado “la necesidad de fortalecer los procedimientos y mecanismos que las instituciones de crédito utilizan para identificar a los usuarios que contratan con ellas algún tipo de producto o servicio, o bien realizan operaciones en ventanilla, para así prevenir y/o detectar fraudes como la suplantación de identidad”.
Con esto, se espera que para el 2018 los bancos ya cuenten con estos sistemas, que entre otras cosas utilizaran los datos biométricos recabados por el Instituto Nacional Electoral (INE), el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o el Servicio de Administración Tributaria (SAT), para verificar la identidad de sus clientes, sobre todo a la hora de abrir una nueva cuenta o de contratar algún servicio.
En ese sentido, la información será oficial y no solo dependerá de los bancos, tal como lo explicó Marcos Martínez, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), donde explicó que “el objetivo es tener un sistema de identificación único, en donde se pueda incluir la información que también tienen otras dependencias”.
Esto te puede interesar: Conoce que puedes hacer en caso de robo de identidad
Mayor protección a los usuraios
Según información de El Financiero, “las huellas dactilares de los clientes de la banca que se vayan captando se cotejarían con los datos existentes y se irían integrando en una sola base, que sería la que al final se utilizaría por todos los participantes”.
Esto ayudará a proteger a los clientes, sus datos personales y su identidad, ya que según cifras del Banco de México (Banxico), “nuestro país ocupa el octavo lugar a nivel mundial en este delito” y específica que las principales causas del robo de identidad se da por la pérdida de documentos en un 67 por ciento de los casos; 63 por ciento “por el robo de carteras y portafolios” y 53 por ciento “por información tomada directamente de una tarjeta bancaria”.
Así, el hecho de que las personas tengan que identificarse con sus huellas dactilares o en casos más avanzados con identificación facial o de iris ocular, es una manera de aumentar a niveles muy altos los estándares de seguridad en las transacciones bancarias, algo que repercutirá de manera directa en beneficio de los usuarios.
Tal como lo explicó en su momento Fernando Rodríguez Antuña, vicepresidente de Supervisión de Grupos e Intermediarios de la CNBV, “los casos que hay de robo de identidad son relevantes para los usuarios del sistema financiero mexicano porque es una afectación en el buró de crédito” e incluso, se puede relacionar a la víctima con “temas de posible evasión fiscal y hasta de presunción de utilización de recursos de procedencia ilícita”.
