La economía mexicana mejora sus proyecciones pero las turbulencias afectan su desempeño, así lo consideran organismos internacionales quienes siguen viendo a Estados Unidos como uno de los factores de mayor inestabilidad para el país.
Ciudad de México.- Ya sea por las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), los posibles impuestos al acero, aluminio o automóviles; así como los efectos de la reforma tributaria, Estados Unidos sigue siendo la “sombra” de la economía nacional, tal como lo afirmó recientemente el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En su reporte Perspectivas Económicas Regionales. Hemisferio Oeste: Aprovechar el Ímpetu, este organismo internacional asegura que “a corto plazo, la región de México y el Caribe se beneficiará del mayor crecimiento en Estados Unidos, pero a más largo plazo las incertidumbres derivadas de las políticas estadounidenses ensombrecerán las perspectivas”.
Así, el FMI pronostica que la economía en México crecerá 2.3 por ciento en este año y 3 por ciento en 2019, pero las turbulencias externas siguen siendo un factor de riesgo para el desempeño del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
“Aunque una renegociación exitosa del TLCAN aumentaría el crecimiento del comercio, el producto y el empleo, una ruptura desordenada del acuerdo causaría una perturbación severa en las cadenas de valor regionales y afectaría negativamente al crecimiento”, afirmó.
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La OCDE también ve avances con escenario de riesgos
Para la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la economía mexicana tendrá un mejor desempeño de lo pronosticado previamente para este año y ubicó su crecimiento en 2.8 por ciento, cinco décimas más de lo previsto seis meses antes.
A pesar de esto, en el escenario mundial se contemplan varios riesgos y uno de ellos es el TLCAN, ya que este organismo considera que en la medida en que se alcancen acuerdos positivos, en esa medida fluirán las inversiones hacia el país.
“Una vez que la incertidumbre con respecto al resultado de las negociaciones del TLCAN se disipe, la inversión también se sumará al crecimiento”, dice la OCDE en su reporte semestral de previsiones económicas mundiales.
En ese sentido, advierte que “la economía mexicana sigue estando muy expuesta a choques externos” y sobre todo lo que tiene que ver con el tipo de cambio del peso, ya que la volatilidad de la moneda nacional podría aumentar por varios factores.
Según la OCDE, “eventuales turbulencias de los mercados financieros derivadas de posibles cambios en la política monetaria en Estados Unidos o la demora en la ratificación de las negociaciones del TLCAN, podrían provocar volatilidad del tipo de cambio del peso y salidas de capital del país”.
Pero también contempla aspecto positivos de la economía, como el aumento del consumo interno, los “niveles históricamente bajos” de desempleo y el descenso paulatino de la inflación.
Hacienda asegura que factores externos frenan crecimiento
Finalmente, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), coincidió con los organismos internacionales en el sentido de que factores externos frenan el avance económico, por lo que no se pudo lograr el objetivo planteado por este gobierno de alcanzar un crecimiento del 5 por ciento.
José Antonio González Anaya, secretario de Hacienda, señaló que “hubo el choque petrolero más grande de la historia de México”, también “enfrentamos vientos en contra y se cayó el precio del petróleo 70 por ciento”, aunado a “una desaceleración en la producción industrial estadounidense y bastante nerviosismo en los mercados internacionales”, y a pesar de esto se sigue creciendo.
“La economía mexicana avanza más que las de Brasil, Argentina, Chile, Colombia y Estados Unidos, con un crecimiento de 2.7 por ciento en promedio durante los últimos años”, concluyó el funcionario.
