La CICAA dio a conocer que entrarán en vigor 17 recomendaciones derivadas de su 23ª reunión ordinaria, celebrada en noviembre de 2013, en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
Boca del Río, Ver.- Con el propósito de regular la pesca de especies como el pez vela, marlin, espada, así como de garantizar su sustentabilidad, expertos de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún en el Atlántico (CICAA) revisan la información sobre parámetros biológicos y datos de marcado de ejemplares por laboratorios especializados, para evaluaciones de volúmenes de las especies.
Entre los elementos que consideraran destaca el tipo de embarcaciones, artes de pesca, técnicas de captura y manejo de los productos desde que se pescan hasta que llegan a los mercados en tierra.
Para este tipo de trabajos, la CICAA opera un programa regional de observadores embarcados en cargueros y en buques de pesca.
Asimismo, se dio a conocer que el próximo 10 de este mes entrarán en vigor 17 recomendaciones derivadas de su 23ª reunión ordinaria de la CICAA, celebrada del 18 al 25 de noviembre de 2013, en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
Durante el encuentro que se celebra del 2 al 6 de junio, en Veracruz, el titular de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA), Mario Aguilar Sánchez destacó la importancia internacional del organismo regional de evaluación pesquera.
Subrayó que este Comité Científico es uno de los pilares que tiene el CICAA, “que es ejemplar en muchas de sus tareas y por ello es para nuestro país muy importante participar en estos trabajos, más ahora con la integración de Latinoamérica, y parte de esa integración tiene que ver con que podamos ser anfitriones de reuniones como esta”.
Por su parte, el presidente del Comité Científico de Información y Estadística, Josu Santiago, recordó que el grupo ha llevado a cabo la evaluación del pez vela en 2011 y 2012, y esta reunión será un hito para continuar mejorando en nuestros trabajos en las especies de picudos.
A la sesión del CICAA asisten expertos procedentes de España, Francia, Estados Unidos y México, tienen el objetivo de analizar científicamente el esfuerzo pesquero que anualmente se despliega frente a los litorales de países de Centro y Sudamérica.
