La Independencia, la Reforma y la Revolución Mexicana son, para AMLO, las primeras tres transformaciones del país. Su mandato, dice, será la cuarta.
Andrés Manuel López Obrador lleva ya varios años hablando sobre la “cuarta transformación del país”. Se trata de un concepto que ha formado parte de su discurso durante mucho tiempo, pero que es justamente hasta hace unos meses, cuando su campaña cobraba más fuerza y se perfilaba como el posible ganador de las elecciones, que adquirió mayor relevancia.
Pero ¿a qué se refiere Andrés Manuel exactamente cuando habla sobre la cuarta transformación?
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Aunque no se trata de un discurso completamente claro, el líder izquierdistas ofreció detalles sobre a lo que se refiere durante el discurso que pronunció en su cierre de campaña en el Estadio Azteca.
Para Obrador, esta cuarta transformación tiene que ver con la construcción de un verdadero Estado de Derecho, en el que todo se todo marche bajo el lema “al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie”.
“Nuestra lucha tiene como antecedentes a las tres grandes transformaciones que ha registrado la historia de nuestro país: la Independencia, la Reforma y la Revolución convocada en 1910. Ahora de manera pacífica buscamos, entre todos y desde abajo, llevar a cabo la cuarta transformación de la vida pública de México”, ha declarado Obrador sobre su movimiento.
Nuestra lucha tiene como antecedente las tres grandes transformaciones de nuestro país: La Independencia, Reforma y La Revolución de 1910. Ahora de manera pacífica buscamos la cuarta transformación. En menos de 6 meses se sabráhttps://t.co/9TPKUWI35s
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) January 2, 2018
También ha dicho al respecto que quiere pasar a la historia como un buen presidente, como un mandatario que logró cambiar al país como hicieran Hidalgo en la Independencia, Juárez en la Reforma o Madero en la Revolución.
Sin embargo, ninguna de estas ideas parece dar idea clara de lo que le espera, o al menos así considera Obrador al país. Para el virtual presidente electo, durante los próximos 6 años, se respetarán las ideas distintas y todos las religiones, además de que se garantizará el derecho a disentir.
Obrador también ha asegurado que garantizará elecciones libres, por lo que enviará una iniciativa al Congreso para que los delitos electorales se vuelvan delitos graves a fin de “poder enviar a la cárcel sin derecho a fianza a funcionarios, dirigentes de partidos y ciudadanos que violen el principio de sufragio efectivo”.
También intentará reformar el artículo 102 de la Constitución a fin de que el presidente en funciones pueda ser juzgado por corrupción. Eliminar los “lujos” del gobierno e implementar una “austeridad republicana” también es uno de los puntos clave de la llamada cuarta transformación del país.
Por supuesto, todos estos son cambios radicales que han levantado críticas entre los más férreos detractores de Obrador, pero para muchos también se trata de promesas de campaña difícilmente conseguibles.
¿Logrará AMLO instaurar “la cuarta transformación del país”?