La efigie dorada de casi 37 metros de altura fue financiada principalmente por algunos empresarios, aunque habitantes también contribuyeron.
Beijing (elsemanario.com).- Una colosal estatua de Mao Zedong (1893-1976) está cerca de concluir su construcción, en una zona rural en la zona central de China, como un homenaje al controvertido exmandatario chino y líder comunista.
La gigantesca efigie, pintada de color dorado, de casi 37 metros de altura, tras más de nueve meses de construcción, recibe los últimos retoque para dominar lo que hasta hace poco era un paisaje agrícola del condado rural de Tongxu, en la provincia de Henan.
El suntuoso homenaje a Mao fue financiado por empresarios locales que gastaron unos 3 millones de yuanes (cerca de 460 mil dólares), aunque al parecer también colaboraron en su construcción, según indican reportes de medios locales.
La construcción de la efigie, fabricada con acero y cemento, puede ser considerada polémica pues ha recibido tanto expresiones de júbilo como múltiples críticas por la población china que se expresó a través de las redes sociales.
Según refieren medios como la BBC y El País, que citan a usuarios chinos, algunos han criticado la estatua de Mao por la gran cantidad de residuos generados para su construcción, además la han calificado como un “despilfarro” de recursos. Otros se muestran de acuerdo con el nuevo monumento, incluso algunos medios chinos indican que ya comenzó a generar visitantes.
Polémica estatua
Mao estuvo al frente del poder en China por casi tres décadas, bajo las cuales se establecieron diversas políticas consideradas polémicas por los impactos negativos económicos y sociales que tuvieron en el pueblo chino.
De hecho, Henan, la provincia en la que se erigió la estatua sufrió una hambruna durante la década de 1950 como resultado de las políticas de Mao, causando la muerte de millones de personas.
Quién fue Mao
Mao Zedong fue el máximo dirigente del Partido Comunista de China y murió el 9 de septiembre de 1976, este año se cumple el 40 aniversario de su fallecimiento.
Pese a ser culpado de la muerte de miles de personas, Mao sigue siendo una figura reverenciada en toda China, se le considera como el fundador de la República Popular China (dirigió al país entre 1949 y 1976). Un retrato suyo preside la plaza de Tiananmen en Beijing.
El actual gobierno encabezado por Xi Jinping –que se refiere a él como una “gran figura”– se ha valido del legado de Mao para lograr más apoyo, aunque ha admitido que el líder cometió “errores”.
El año pasado, el gobierno chino invirtió 15 mil 500 millones de yuanes (unos 2 mil 500 millones de dólares) en proyectos relacionados con la conmemoración del natalicio del controvertido personaje.
