México y Estados Unidos podrían estar en riesgo de enfrentar un nuevo conflicto ante la necesidad de negociar el abasto de agua fronteriza del Río Colorado, debido a que este año termina el acuerdo pactado para el uso de este recurso.
Ciudad de México.- Una nuevo enfrentamiento puede estarse gestando como parte de la construcción del muro fronterizo, por lo que México y Estados Unidos también tendrán que negociar el agua fronteriza del Río Colorado del que nuestro país puede hacer uso.
Este río nace en el estado de Colorado y tiene una longitud de aproximadamente de 2500 kilómetros, irriga gran parte de las llanuras desérticas de los estados de Colorado, Utah, Arizona, Nevada, California, Baja California y Sonora hasta desembocar en el Mar de Cortés.
Pero según el Centro para el Progreso Estadounidense (CAP), las dificultades con que se han desarrollado las nuevas relaciones entra la administración Trump con el gobierno mexicano, podrían derivar también en un conflicto por estas aguas.
Esto debido a que en este año se vence la vigencia del Acta 319, un documento que las autoridades mexicanas firmaron con el gobierno de Barack Obama en 2012, en donde se permitía que la porción de agua que le corresponde a México de este río, fuera almacenada en el Lago Meade, ubicado en Nevada.
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De esta manera, México y Estados Unidos también tendrán que negociar el agua fronteriza del Río Colorado de manera inmediata y bajo la incertidumbre que empaña actualmente a esta relación bilateral.
De acuerdo a la visión del CAP, “una descompostura de las relaciones entre Estados Unidos y México podría poner más tensión en los abastos de agua y detonar condiciones de escasez con un impacto devastador sobre empleos y economía”.
Según publicó El Economista, actualmente más de 35 millones de estadounidenses y dos millones de hectáreas de riego dependen del agua potable del río Colorado.
A estas negociaciones políticas el centro las considera como de vital importancia dado los bajos niveles de agua que posee el Lago Meade, lo que podría agravar un posible problema de desabasto en la frontera entre ambos países.
Por tal motivo, el CAP considera que México y Estados Unidos también tendrán que negociar el agua fronteriza del Río Colorado, bajo la vigilancia de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), que sirva de juez ante posibles desacuerdos entre ambos países.
