Naciones Unidas reveló que el costo económico de la corrupción en el mundo supera los dos billones de dólares anuales.
El robo o desgaste que sufre la economía global por actos de soborno y otras prácticas de corrupción se estiman en 2.6 billones de dólares por año, equivalente al cinco por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional contra la Corrupción, el programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), precisó que los países en desarrollo pierden por la corrupción 10 veces más que el dinero dedicado oficialmente al desarrollo.
“Ningún país, región o comunidad es inmune”, señaló Naciones Unidas para la cual este tipo de prácticas afecta de manera negativa a todos e impide en consecuencia el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por su parte el Papa Francisco en su cuenta de Twitter se sumó a esta jornada y señaló que “la corrupción degrada la dignidad de la persona y destruye los ideales buenos y hermosos.”
“La sociedad está llamada a comprometerse concretamente para combatir el cáncer de la corrupción que, con la ilusión de ganancias rápidas y fáciles, en realidad empobrece a todos”, escribió en su tuit.
A su vez, Transparencia Internacional (TI), acreditada por sus acciones anticorrupción, advirtió que “la corrupción es uno de los mayores obstáculos para garantizar la efectividad de las medidas de adaptación y mitigación del cambio climático”.
Advirtió que “en países en los que impera la corrupción, el financiamiento internacional para la protección del medioambiente está en riesgo, y también se crean las condiciones para crímenes como la tala y la minería ilegal y, en muchos casos, el asesinato de activistas ambientales.”
Llamó a reafirmar el Objetivo de Desarrollo Sustentable 16: “la corrupción es un obstáculo para diseñar y ejecutar políticas a favor del ambiente, la igualdad y el desarrollo de todos los países”.
“Si se reduce la corrupción que afecta a las inversiones y acciones climáticas, se incrementará la confianza y aumentará el volumen de recursos destinados a la protección ambiental”, señala dicho Objetivo.
En su mensaje por el Día Internacional contra la Corrupción, António Guterres, secretario general de la ONU, señaló que “la evasión de impuestos, el blanqueo de dinero y otros flujos ilícitos desvían de su destino recursos muy necesarios para escuelas, hospitales e infraestructura esencial”.
Se trata de fondos esenciales para promover los Objetivos de Desarrollo Sostenible, subrayó.
Reconoce el enfado de la gente por la corrupción, que “amenaza el bienestar de nuestras sociedades, el futuro de nuestros hijos y la salud de nuestro planeta. Debe ser combatida por todos, para todos”.
Para 2021 la Asamblea General de Naciones Unidas realizará su primer periodo extraordinario de sesiones dedicado al combate a la corrupción, recordó por último Gueterres.