Montar bicicleta al trabajo está vinculado a un menor riesgo de desarrollar cáncer en un 45 por ciento y las enfermedades cardiovasculares en un 46 por ciento.
Las personas que cambian su viaje en coche, metro o autobús por un viaje en bicicleta podrían reducir el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón y el cáncer, casi a la mitad, de acuerdo a una nueva investigación. Sin embargo, también se ha advertido sobre la “necesidad urgente” para mejorar las condiciones de tránsito para los ciclistas, informa CNCB.
Caminar al trabajo también ofrece beneficios para la salud, pero no al mismo grado que el ciclismo según investigadores de la Universidad de Glasgow.
Para el estudio, se le preguntó a 264.337 participantes cómo viajaron a trabajar en un día típico. Su salud fue supervisada durante cinco años y los resultados ajustados por variables tales como: sexo, edad, enfermedades existentes, tabaquismo y dieta.
En general, las personas que viajaron en bicicleta al trabajo tuvieron un riesgo 41 por ciento menor de muerte prematura, en comparación con aquellos que manejaron o usaron transporte público.
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Los científicos dijeron que: “Los resultados, si bien causales, sugieren que la salud de la población se puede mejorar mediante políticas que incrementan el transporte activo, sobre todo la bicicleta”. Estas políticas podrían incluir “la creación de carriles para bicicletas, alquilar o comprar bicicletas, y una mejor prestación en el transporte público para ciclistas“, escribieron en el British Medical Journal (BMJ).
Caminar al trabajo redujo el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares en un 27 por ciento y el riesgo de morir por dichas enfermedades un 36 por ciento, pero no parece estar relacionado con un menor riesgo de cáncer o de muerte prematura por cualquier causa, informa Metro.
Tener un trayecto “mixto”, incluyendo los modos activos y no activos de transporte, también está asociado con algunos beneficios para la salud, pero sólo si la parte activa del viaje implica el ciclismo.