Este padecimiento es muchas veces mal diagnosticado y puede poner en riesgo la salud de los pacientes.
El corazón roto no es una metáfora, es un sufrimiento real; afirma el cardiólogo Álvaro Contreras Villaseñor, académico de la Facultad de Medicina de la UNAM. En los años 90’s se reconoció como un problema médico que afecta al corazón y conlleva estrés, tensión, falta de aire y arritmias. Se estima que cerca de 4 mil personas en el mundo lo sufren.
El padecimiento llamado miocardiopatía por estrés, puede ocurrir por un evento intenso como la muerte de un ser querido o terminar una relación (tristeza). Este sentimiento se confunde con un infarto, asegura Contreras.
El corazón roto ocurre cuando el ventrículo izquierdo del corazón se inflama por exceso de catecolaminas, neurotransmisores como la adrenalina y dopamina, que se producen en situaciones de riesgo o alerta y afecta principalmente a mujeres de adultas. Se estima que el 30 por ciento de los pacientes han manifestado antecedentes de estrés, 30 por ciento personas tienen historial médico de terapia intensiva y el 40 por ciento restante se desconocen las causas.
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Su tratamiento es diferente en cada persona, sin embargo, suele estar acompañado de terapias de apoyo psicológico.
En México esta enfermedad suele ser infradiagnosticada (diagnosticada de forma incorrecta). “Muchas veces menospreciamos la salud emocional y mental; por ejemplo, a personas con depresión se les dice ‘ponte contento’ y creemos que con eso se solucionará; es como decirle a alguien ‘no te infartes’. Hay cuadros que pueden ser muy aparatosos y otros que son muy inocentes, y que probablemente mejoren con el apapacho y el caldo de pollo, pero no es algo seguro”, concluyó Álvaro Contreras.
