El sector restaurantero se ha visto afectado por las reducciones al PIB ya que un menor dinamismo de la economía deriva en un menor gasto de las personas en restaurantes.
Las recientes bajas en la estimación de crecimiento del país han generado incertidumbre en ciertos sectores, como el restaurantero, que en esta ocasión vio también reducida su expectativa de crecimiento.
Con base en información de Diario Milenio, obtenida mediante entrevista con el presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Hugo Vela Reyna, indicó que la expectativa de crecimiento para el sector era de tres por ciento para este año, pero ahora ésta es de 1.8 por ciento.
Explica que la baja se ve derivada del poco dinamismo de la economía mexicana, por lo que “la sociedad en general cuenta con menos dinero disponible para realizar gastos fuera del hogar”.
Agrega que, desafortunadamente el sector restaurantero depende de la capacidad económica del consumidor, por lo que cuando se habla de una reducción del PIB, también existe riesgo para el sector”.
Vale Reyna mencionó que “en el momento que las personas empiezan a tener una menos disposición de dinero, los primeros rubros que recortan son los gastos en restaurantes.
Un ejemplo de ello, según cita Milenio, es que en julio debido a los cinco fines de semana que tuvo el mes, la industria restaurantera se vio beneficiada, pero en agosto se dio una comercialización errática a raíz de los problemas económicos del país.
En tanto, el precio del dólar, el presidente de la Canirac señala que no ha tenido mayor impacto en el sector, ya que los precios al consumidor no se han visto afectados.
Cabe destacar que la baja en el Producto Interno Bruto (PIB), que fue anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), fue de 2.2 al 3.2 por ciento, para después pasar a un rango esperado de 2 a 2.6 por ciento.
Fernando Apórtela, subsecretario de Hacienda, mencionó que lo anterior deriva de un entorno económico mundial de gran volatilidad, como lo es la baja en los precios del petróleo, el Brexit y la depreciación del peso frente al dólar.
Aunque destacó que el desempeño de la economía mexicana ha sido bueno, ya que los indicadores económicos como el consumo y la inversión han sido positivismo.
Redacción
