Seguramente esta pregunta de qué es mejor, desarrollar habilidades sociales o de conocimientos, es una de las preocupaciones de algunas personas.
Ciudad de México.- El mercado laboral y empresarial exige a las personas un nivel de especialización cada vez mayor, por lo que muchos dedican gran parte de su vida a esto y descuidan otras áreas, mientras que para otros, la clave del éxito radica en las relaciones pero ¿qué es mejor, desarrollar habilidades sociales o de conocimientos?
La realidad es que ningún extremo es bueno, más bien el secreto radica en poder lograr un equilibrio que permita tener las habilidades técnicas y cognitivas necesarias para desempeñar puestos importantes, así como la posibilidad de convivir con otras personas de manera sana y productiva.
Si bien es cierto que en muchos casos las buenas relaciones son las que ayudan a conseguir lo que se desea, sino se está preparado para esto seguramente se cometerán errores costosos que pongan en duda nuestra capacidad de liderazgo e incluso profesional.
El priorizar sobre el hecho de desarrollar habilidades sociales o de conocimientos debe ir orientado hacia lograr un crecimiento integral, ya que como dice el sitio Entrepreneur, “los emprendedores necesitan tener cualidades de liderazgo, así como capacidad de trabajar en equipo y escuchar”, es decir, es una combinación de ambas.
Pero también es un ejercicio importante para descubrir el tipo de personalidad, ya que para muchos profesionales que les cuesta entablar relaciones interpersonales duraderas, a través de aumentar de manera continua sus conocimientos logran conseguir un respeto dentro de las organizaciones, pero siempre tendrán una parte que debilita su crecimiento en el área social.
Por otra parte, los que son muy buenos en relaciones públicas pueden mejorar sus posiciones dentro de una compañía o hacer crecer proyectos emprendedores, pero si no se tiene la capacidad de resolver las exigencias que cada cargo tienen, nunca será un líder aceptado, respetado y querido.
De esta manera, contrario a lo que piensan muchas personas, desarrollar habilidades sociales o de conocimientos son complementarias y no excluyentes, pero la clave está en buscar el momento idóneo para aplicarlas.
