El Buen Fin, la tan esperada temporada de descuentos, es no solamente una oportunidad para que los consumidores obtengan precios más bajos, sino que sirve de impulsor en ventas del comercio en general, como los son los minoritas o retail.
Ciudad de México – Según la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), noviembre significa una temporada importante paras las tiendas, pues los grandes volúmenes de ventas, hacen que sea un mes importante para todo el sector comercial.
Según la asociación, el 32 por ciento de sus ventas totales del cuarto trimestre de 2016 se efectuaron en dicho mes, mientras que, en 2010, un año antes de que se implementara el Buen Fin, era el 27.9 por ciento para el mismo cuatrimestre.
Los cerca de cerca puntos porcentuales de diferencia significan 16 mil millones de pesos, equivalentes al presupuesto anual del Metro de la Ciudad de México o a la inversión presupuestada por Wal-Mart de México y Centroamérica el año pasado.
“Es una temporada muy importante, y te da sustento para mantenerte optimista en el tema del crecimiento. De hecho, pudiera ser que ya le esté quitando un poco de peso al mes de diciembre, pues si el consumidor tenía planeada la compra de un bien duradero, es posible que aproveche alguna oferta en el Buen Fin para adelantar su adquisición”, explicó Valentín Mendoza, analista de Banorte-Ixe.
“Es una temporada muy importante, y te da sustento para mantenerte optimista en el tema del crecimiento. De hecho, pudiera ser que ya le esté quitando un poco de peso al mes de diciembre, pues si el consumidor tenía planeada la compra de un bien duradero, es posible que aproveche alguna oferta en el Buen Fin para adelantar su adquisición”, explicó Valentín Mendoza, analista de Banorte-Ixe, citado por El Financiero.
Para Wal-Mart , el único retailer público que revela de forma mensual sus ventas, la contribución de noviembre en la facturación del último trimestre creció 3 puntos porcentuales en los últimos siete años, al alcanzar el 31 por ciento en el 2016.
De hecho, desde 2011, cuando se celebró la primera edición del Buen Fin, noviembre se posicionó como el segundo mes más importante del año en términos de ingresos, sólo por debajo de diciembre; incluso desplazó a mayo -con las ventas de Día de la Madre- y julio -con las campañas promocionales de verano- que antes de ese año se disputaban la segunda posición.
“El evento se ha vuelto muy relevante, ya todo mundo lo tiene muy arraigado en su planeación, y esto se da en ambos lados, el de los retailers y el del consumidor. Es algo que ha cambiado el entorno de compras en la temporada decembrina”, dijo Carlos Hermosillo, analista de Actinver Casa de Bolsa.