Ladrón, fiestero pero astuto y sabio, es el mito del tlacuache, ¿algún parecido con la realidad?

Lectura: 3 minutos

En muchos mitos indígenas el tlacuache aparece como el jefe del mundo, el astuto que enfrenta el poder de los jaguares, pero al mismo tiempo hace bromas, engaña, y es un ladrón, fiestero y borracho.

Ciudad de México.- El tlacuache (del náhuatl tlacuatzin) es el único animal marsupial que existe en el territorio mexicano y habita en las zonas templadas y tropicales de México. Se dice que es de los pocos animales que se conserva sin variaciones desde que apareció en nuestro planeta hace más o menos 60 millones de años, cuando los mamíferos comenzaron a poblar la tierra.

Este pequeño animal ha sido la figura central de algunos mitos de los grupos indígenas del país, y aunque no se sabe con precisión cuándo empezó a relacionarse al tlacuache con hazañas míticas, se han descubierto figuras de barro en forma de tlacuache que datan del año 1000 antes de nuestra era y se han encontrado menciones sobre este animal en algunos códices.

Vasija de barro en forma de tlacuache del precásico tardío / Imagen: Jorge Pérez de Lara
Vasija de barro en forma de tlacuache del precásico tardío / Imagen: Jorge Pérez de Lara

Los mitos son narraciones que tratan siempre de un “tiempo anterior” cuya función es explicar o justificar el origen, el desarrollo o la causa de algún aspecto de la vida social. El mito tiene su propia lógica y lenguaje, y aunque a simple vista pueda parecer que no tiene sentido, esconde muchas claves que ayudan a comprender la realidad social.

La acción principal del tlacuache en los mitos es el robo, pues gracias a su cola prensil y a su marsupio o bolsa en la que lleva a sus crías, puede robar lo que se le antoje.

De acuerdo con uno de los mitos, el tlacuache logra engañar al dueño del fuego, aproximándose con cautela a la hoguera diciendo que está cansado y con frío, cuando de repente toma una brasa y sale corriendo o la oculta en su bolsa, por lo que ésta se le quema.

“El mito del robo del fuego ha confluido con la tradición cristiana, y algunas versiones lo ligan al nacimiento de Jesús. La Virgen y el Niño padecen de frío y el tlacuache roba el fuego para calentarlos. Llega a ser recompensado con la facultad de la resurrección o con el marsupio en el que cuida a sus hijos”, refiere el antropólogo López Austin.

El régimen alimenticio del tlacuache le permite comer de todo, pues es un animal omnívoro, desde frutos o insectos hasta desperdicios producidos por el hombre. Entre sus gustos se encuentra el aguamiel de los magueyes, por lo que se puede decir que además de ser un ladrón, es también un borracho, de acuerdo con la UNAM.

“En muchos mitos y leyendas indígenas, el tlacuache tiene un lugar privilegiado. Aparece como el jefe del mundo, el resistente a los golpes, el despedazado que resucita, el astuto que enfrenta el poder de los jaguares, el jefe de los ancianos consejeros, el civilizador y benefactor, el abuelo respetable y sabio, pero al mismo tiempo es un pícaro que hace bromas y engaña, un ladrón, fiestero, borracho, parrandero y lascivo”, apuntan en la casa de estudios.

Este animalito se puede encontrar con frecuencia en las ciudades, dentro de los botes de basura, en los jardines, en alcantarillas y coladeras, y cuando se encuentra con algún depredador su estrategia es “hacerse el muerto” o “hacerse el tlacuache” como le llaman algunos campesinos.

Todas estas características lo convierten en un personaje mítico sumamente interesante, y bien podría adaptarse para explicar algunos fenómenos sociales recurrentes en nuestros días.

Tlacuache / Imagen: Tumblr
Tlacuache / Imagen: Tumblr

elsemanario.com con información de la UNAM.

0 0 votos
Calificación del artículo
Subscribir
Notificar a
guest
1 Comentario
Más viejo
Nuevo Más Votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Blas Jasso

Ahí viene el Tlacuache…¡

1
0
Danos tu opinión.x