Imaginemos que el mundo que conocemos no es el mismo. Aún no se descubre siquiera el internet, las fronteras están cerradas y nuestra única manera de tener contacto con el mundo es a través del teléfono. En este universo paralelo, algunas de las marcas más reconocidas a nivel internacional son completamente diferentes, persiguen diferentes objetivos y, se dedican a lo que “originalmente” les empezó a dejar dinero:
- Hasbro vende retazos de tela a empresas que rellenan materiales como sillones, peluches, etc.
- Avon tiene una cantidad impresionante de libros que vende de puerta en puerta.
- 3M sólo comercializa su especialidad: el corindón mineral (material necesario para hacer neumáticos).
- Colgate es uno de los vendedores estrella de velas y almidón de Estados Unidos.
- Steren es la zapatería más famosa del momento.
Aunque usted no lo crea, esos fueron los primeros inicios de las marcas antes mencionadas. Todas ellas cuentan con una historia de varios años (e incluso, algunas tienen más de un centenario), dedicándose a la comercialización de productos y servicios totalmente alejados de lo que hoy se dedican.
La adaptación es una de las características primordiales cuando se habla de prevalecer en el mercado. A lo largo de la historia de la humanidad, el sistema económico, situaciones sociales, culturales, etc. y, sobre todo, la pericia de sus líderes ha permitido a algunas empresas situarse como modelos exitosos ante el paso del tiempo. Todas ellas mantienen características singulares y diferenciaciones graduales, lo que resulta de entender y adecuarse al mercado en que viven, siendo resilientes y aceptando los cambios de manera inteligente.
Estas empresas forman parte de una especie de élite en cuanto al crecimiento y posicionamiento no sólo en nuestro país, sino en todo el mundo, además de compartir historias con mensajes de apertura, humildad y visión empresarial.
¿Cómo cambiar el core business de una empresa?
Primero que nada, los líderes se caracterizan por entender que el mercado actual es cambiante; para ellos, las planeaciones estratégicas son una guía, más no su base. Saben que en cualquier momento, con cualquier acontecimiento, las cosas pueden cambiar de rumbo y aunque no comprendan bien qué es lo que ocurre, saben reaccionar ante las oleadas de cambios. Adicionalmente, investigan y proponen estrategias basándose en estudios, opiniones de sus clientes y en la retroalimentación de su gente de campo.
Un día, el joven Charles Darwin embarcó el HSM Beagle con una misión: participar en la expedición científica alrededor del mundo por cinco años. Durante ese tiempo, no recibió pago alguno; pero una vez que llegó a casa, escribió “El origen de las especies” y en el capítulo V llegaba a una conclusión contundente sobre la EVOLUCIÓN de los seres vivos: No sobreviven las especies más fuertes, sino los que mejor se adaptan al cambio. Así, las empresas, tienen que seguir su camino evolutivo, cambiando y adecuándose a las condiciones empresariales, nacionales y globales durante toda su historia.