Hola amor como amaneciste????? Wuauuuuu me encanto decirnos uchicuchimichi cositas con muñequitos en whats App!!!!!!!!!!!!!!!
Whatsapeo con mis hijos, colaboradores, hermanas, mis amigos, algunos clientes, hasta con mi lavacoches! Hoy en día en nuestra vida diaria un mensaje inmediato tiene la magia de dejarnos conectados.
Si el siglo XX se caracterizó por instituciones de gran escala, la especialización en el trabajo, burocratización y provocar que el trabajo productivo de las personas se convierta en rutinas predecibles, el siglo XXI va a quedar profundamente marcado por aplicaciones que están cambiando nuestra forma de pensar, actuar y comunicarnos.
En nuestra cotidianidad pareciera que los cambios son sutiles, pero si observamos con cuidado, nos daremos cuenta de cuantas normas de conducta y valores han sido transformados por algo tan simple como el whats app.
Me es común ver que estando en un restaurante con un grupo de personas, cualquiera asumiría que acudieron a comunicarse entre ellos, pero en realidad a través del IPhone, Blackberry o Nokia, cada uno se está comunicando con alguien ausente en el lugar a través del whats App (o incluso entre ellos mismos en secreto de alguno que también esté en la misma mesa); tal vez y contra las formas de etiqueta más simples estás hablando con alguien acerca de tu interlocutor!!! Y a nadie parece molestarle.
Ortografía? En whats app eso no importa, todo es error de dedo y no de educación, no hay acentos, puntuación o mayúsculas. Se vuelve interesante que ni siquiera necesitas saber leer y escribir el idioma emoji (el lenguaje de íconos de whats up) el cual es universal entendido por todos y mucho más simple que la oración escrita acostumbrada en el pasado.
Me atrevo a decir que ser analfabeta en el siglo XXI no es el no saber leer y escribir, es no desaprender todo lo aprendido para aprender lo nuevo. ¿Será que la innovación tecnológica nos está rediseñando?
Dicen muchos que vivimos en una economía del conocimiento o de la información; en realidad vivimos en una mutación bizarra de una economía del contacto inmediato, de la curiosidad que desconcentra, de la penetrante inmediatez del estímulo. Algunos autores dicen que estamos entrando a la economía de la relevancia. Alguien por favor explíqueme que significa eso? Y como es que mandar mensajes a la 1 de la madrugada me hace relevante?
La innovación tecnológica ha creado una dependencia … y además una demanda extraordinaria. Ahora en mi “Smartphone” quien me escribe sabe si ya fue leído mi mensaje; esto me podría obligar a responder sin déjame pensar mi respuesta. En las conversaciones con mi amigo afectivo más cercano, al contrario, permite el silencio en una relación profundamente social.
Paradójicamente y contrario a la conversación cara a cara, los trabajadores ya no están encadenados a su silla, han logrado maximizar el número de contactos no relacionados con el trabajo. Intercambian ideas y energía con aspectos fuera del trabajo, enamoran y se enamoran a través de whats app.
Mientras sigo escribiendo cositas de “afecto” a mi amigo, también se vislumbra la oportunidad de sacar provecho a whats app para el trabajo. Cómo te anuncias? envías mensajes provocativos? emocionas a tus contactos? Cómo generas valor? Provocas o estimulas con whats app?
“Buenas noches amor que sueñes con los angelitos”
¡Y una carita amarilla con dos corazones rojos responde sin texto!