Felipe Calderón

En AMLO, las emociones cuentan

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La promoción de una consulta popular sobre el enjuiciamiento jurídico de cinco expresidentes, tiene motivaciones de algún peso racional pero son mayores las emotivas. Con frecuencia, López Obrador no logra ocultar sus emociones y luego trata de revestirlas de razones; sus críticos las ven como “ocurrencias”, que a veces lo son.

Respecto a la pregunta y sus considerandos a consultarle al pueblo, expertos como Pedro Salazar (¿Es constitucional la consulta?, El Financiero, 16/09/2020) consideran que sobran razones para que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declare su inconstitucionalidad.

No obstante, aunque quedara desechada y archivada en el Congreso, AMLO gana con la sola presentación de la pregunta, por supuesto, entre su fuerza electoral.

Y aquí es donde entran dos poderosos motivos emocionales de la iniciativa: en primer lugar, seguir tocando fibras sensibles de los sectores sociales que durante mucho tiempo se sintieron humillados e ignorados por el poder público. Ninguna representación mejor de ese poder distante y abusivo que los cinco expresidentes.

Felipe Calderón y López Obrador
Imagen: Status Puebla.

Además, esos millones de mexicanos se sienten ahora débiles, vulnerables y urgidos de creer (sin mayor reflexión) en que alguien tiene respuestas ante tanta incertidumbre que representan la pandemia y la precariedad de los empleos, y las tensiones intrafamiliares desatadas en el confinamiento.

López Obrador habla para esos mexicanos dolidos, que ahora además, se sienten vulnerables, y lo hace con conocimiento y grados de sinceridad; reivindica sus ofensas mostrándose rijoso contra quienes ha identificado como los corruptos enemigos del país (algunos en verdad lo son); ante ese público denuncia todos los días los movimientos con que sus adversarios quieren frenarlo y se empeña en mantener alta la esperanza con su “vamos muy bien”.

Sus ideas son digeribles para millones de personas, pero tienen dos enormes limitaciones: una, que sectores como las clases medias, los pequeños y medianos empresarios no encuentran elementos de identificación significativa entre el discurso presidencial y sus ganas de volver a contemplar un futuro menos incierto y más promisorio.

Otra limitación son las dificultades que ya tiene su gobierno para cumplir con las expectativas de su base social; los efectos de la pandemia, de la caída de actividades económicas y de los ingresos petroleros son profundos, y casi imposibilitan los compromisos del sexenio con el abatimiento de la pobreza, de las desigualdades y de la inseguridad pública.

Enrique Peña Nieto, juicio y corrupcion
Imagen: El CEO (Gettyimages).

En los dichos y actitudes del presidente se puede percibir un segundo motivo emocional al promover la consulta, que es que efectivamente se le hizo mucho daño al país, lo que a cualquiera que quiera darse cuenta le da coraje; pero con quien AMLO da muestras de tener mayor enojo es con Felipe Calderón.

El presidente está convencido de que el “haiga sido como haiga sido” con que Calderón llegó a la presidencia, fue robándosela a él; además lo ha responsabilizado de haberle declarado la guerra al narcotráfico teniendo un secretario de seguridad pública contra quien se acumulan evidencias en Estados Unidos de que estaba coludido con criminales (que el juez Brian Cogan en Nueva York tendrá que valorar).

Y más allá de lo que AMLO considere, el sexenio de Calderón también fue un desastre económico, si se considera que le ingresaron a las arcas públicas 160 mil millones de dólares que generó Pemex como superávit en su balanza comercial externa, millones que no se tradujeron en mayor generación de inversiones, ni de empleos, ni en el abatimiento de desigualdades, pero sí en corrupción.

Como referencia, el superávit de Pemex cayó a 41,400 millones de dólares para todo el sexenio de Peña Nieto, y desapareció hasta volverse negativo en lo que va del sexenio actual, debido a la depreciación internacional del crudo, lo que es un lastre imprevisto que limita enormemente los márgenes de acción del gobierno.


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El silencio de Peña Nieto

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Era tradición en el régimen hegemónico priista que los presidentes guardaran silencio al concluir su mandato. Después del 68, en que la lucha estudiantil rasgó la hasta entonces intocable investidura presidencial, las cosas cambiaron. Fue el propio expresidente Gustavo Díaz Ordaz quien en su desacuerdo con la política “izquierdista” del presidente Luis Echeverría Álvarez, rompió esta regla de oro en la política mexicana en su encargo de Embajador en España, cuando después de ser operado de sus ojos, declaró que “seguía viendo dos presidentes”.  José López Portillo, su sucesor, quien envió como embajador a su antecesor a las Islas Fiyi, colonia ex británica en la lejana Oceanía, que resultaba un menosprecio a su amigo de toda la vida, hizo publicar la famosa frase de “También tú, Luis”, en los todavía sumisos medios de comunicación, principalmente la prensa, que ahondó el rompimiento del compromiso del “elegido por el PRI” como candidato presidencial, bautizado popularmente como el dedazo.

El expresidente Miguel de la Madrid, no se quedó atrás y declaró públicamente que su designado, Carlos Salinas de Gortari, se había robado la partida secreta presidencial, quien optó por presionarlo para decir por escrito, que no estaba en pleno uso de sus facultades mentales, para acallar el escándalo. En ello intervino directamente Emilio Gamboa Patrón, en ese tiempo jefe de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, quien había sido secretario particular del primero y secretario de Comunicaciones del segundo. Ernesto Zedillo tuvo un encontronazo con el propio Salinas de Gortari que le valió a éste el autoexilio en la Habana y Dublín, de donde regresó al triunfo del presidente Vicente Fox, y cogobernó el país, recuperando una importante tajada del pastel del poder político y económico.

presidentes de México
Imagen: Twitter @ben_leshem.

Enrique Peña Nieto, no sólo respetó el sexenio calderonista, sino que continuó sus iniciativas, fundamentalmente en materia educativa y petrolera, y logró el Pacto por México, con los dirigentes panistas y perredistas, que mantuvo al PAN a flote y hundió a una izquierda maltrecha y dividida, casi atomizada por sus llamadas tribus, que perdieron su exiguo capital político, olvidando que izquierda que transa, no avanza. Para Peña Nieto significó un triunfo espectacular, aunque efímero, pues la aplastante victoria de Andrés Manuel el 1º de julio de 2018, desinfló al PRD y dividió al panismo, con el surgimiento de Movimiento Regeneración Nacional que logró la hazaña, en sólo cinco años, de hacerse del Poder Ejecutivo y obtener mayoría en el Poder Legislativo Federal, gubernaturas y mayorías en legislaturas estatales.

No obstante la histórica derrota electoral, Enrique Peña Nieto, al parecer, ha optado por volver al viejo estilo del silencio, mientras Fox y Calderón se desgañitan criticando a AMLO –aunque el primero ha sido apaciguado momentáneamente mediante una amenaza fiscal y  ha preferido  declararse un “muerto de hambre” por habérsele quitado su jugosa pensión–, y mientras que Felipe Calderón, relacionado con los supuestos delitos de narcotráfico cometidos por su Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, sigue con su bulla estridente y divorciado del panismo, y junto con su esposa Margarita Zavala, intentan volver al poder mediante la formación de su propio partido político.

Peña Nieto y López Obrador
Imagen: Vértigo Político.

Hay varias preguntas en el aire: ¿Hubo un “silencio pactado” con el candidato de Morena, antes de la elección federal de 2018? ¿Fueron determinantes las encuestas oficiales que apuntaban como triunfador a AMLO, para la decisión de EPN, de rendirse antes de la batalla? ¿El candidato “patito” del PRI, José Antonio Meade, ajeno a ese partido y sin oficio político alguno, sólo fue una finta en la estrategia del posible acuerdo? ¿Por qué ante el desmantelamiento de las “reformas estructurales” –educativa, fiscal y petrolera– EPN, se ha quedado callado y permanece en su glamorosa vida de galán y seductor de bellas mujeres, a pesar de la evidente corrupción en su fatal sexenio? ¿Las reuniones del hoy presidente con Peña Nieto y Meade, posteriores a las elecciones presidenciales, son parte de este entramado subterráneo? ¿Por qué el presidente declara chivo expiatorio a Rosario Robles, hoy en prisión por la llamada Estafa Maestra y no se actúa contra EPN, por éste y muchos otros actos de corrupción durante su gobierno?

Por ahora nos quedaremos con la frase de Mario Benedetti, escritor y poeta uruguayo, que apunta: “Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio”.


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México Libre ¿Un partido de oposición?

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México Libre partido político de Calderón y Zavala logró registro ante el INE

El INE confirmó que México Libre, partido político de Felipe Calderón y Margarita Zavala, logró cumplir los requisitos para su registro con un avance del 115.5 por ciento en asambleas y de 102.4 por ciento en número de afiliados.

La asociación Libertad y Responsabilidad Democrática de la expareja presidencial cumpló con los requisitos para conformar un partido político al reunir 39 mil 513 afiliados, 2.4 por ciento más de los requeridos, y haber realizado 231 asambleas distritales, es decir, 15.5 por ciento más de las necesarias.

En su reporte, el Instituto Nacional Electoral (INE) indicó que Libertad y Responsabilidad Democrática, también llamado México Libre, superó el número de afiliados y asambleas requeridas por el INE, por lo que aspira a ser partido político nacional y luego de esto, competir en las elecciones de 2021.

México Libre busca levantarse como partido de oposición al oficialista Morena del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) que en 2018 arrasó con las bancadas en el poder legislativo.

La crisis política que enfrenta México y que derivó en un tsunami electoral dando una victoria sin precedentes a Andrés Manuel López Obrador, no logra revertirse y no se ha levantado un partido de oposición con la suficiente fuerza para contrarrestar el “efecto AMLO”.

A pesar de los avances en el registro ante el INE, México Libre tendrá que lidiar con los escándalos que ensombrecen el gobierno de Felípe Calderón y que se agudizaron con el arresto y proceso de su entonces secretario de Seguridad, Genaro García Luna, por presuntos nexos con el crimen organizado.

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Otros nuevos partidos a la lista

Redes Sociales Progresistas, ligada a Elba Esther Gordillo, logró un avance de 105 por ciento, con el registro de 21 asambleas. El Partido Encuentro Solidario, antes PES, y Grupo Social Promotor de México, antes Nueva Alianza, también cumplieron con los requisitos de registro.

El INE revisará en los próximos meses la validez de las inscripciones y si no están duplicadas con partidos políticos o asociaciones interesadas en convertirse en partido político. Se espera que a mediados de año haya concluido el procedimiento y se dé a conocer quienes obtendrán el registro como fuerza política.

Aquí entre nos

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Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón, fue arrestado en la localidad de Grapevine, en Dallas, Texas, y es acusado de tres cargos de conspiración de tráfico de cocaína y un cargo por declaraciones falsas. Richard P. Donoghue, fiscal para el Distrito Este de Nueva York, anunció los cargos y detalló que García Luna habría aceptado sobornos multimillonarios para permitir que el Cártel de Sinaloa, encabezado por Joaquín “El Chapo” Guzmán, operara con impunidad en México.

En la imagen de archivo del 02 de junio de 2012, se muestra a García Luna, secretario de Seguridad Pública Federal, y Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de México, durante la ceremonia del Día del Policía en el Centro del Mando de la Policía Federal.

FOTO: ARCHIVO/ MOISÉS PABLO /CUARTOSCURO.COM

Genaro García Luna detenido

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Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad de 2006 a 2012, fue detenido en Dallas, Texas por agentes federales.

Quien fuera secretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, Genaro García Luna, fue arrestado en la localidad texana de Grapevine y acusado de corrupción, informó el sitio especializado ProPublica.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó, mediante un comunicado que García Luna, está acusado en una corte federal de Nueva York por los cargos de tráfico de drogas, falsos testimonios y corrupción.

La dependencia estadounidense añadió que a “cambio de sobornos multimillonarios” García Luna permitió al cártel de Sinaloa “operar con impunidad en México”.

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“García Luna está acusado de aceptar millones de dólares en sobornos del cártel de Sinaloa (controlado por) ‘El Chapo’ Guzmán mientras controlaba la Policía Federal de México y era responsable de garantizar la seguridad pública en México”, dijo el fiscal federal Richard P. Donoghue.

El ex presidente de México, Felipe Calderón, colocó un mensaje en su cuenta oficial de Twitter en relación a este hecho;

“Estoy conociendo por redes sociales la versión del presunto arresto de Genaro García Luna. Desconozco detalles y estoy pendiente de la información que confirme el hecho, como de los cargos que, en su caso, se le imputen. Mi postura será siempre en favor de la justicia y la ley”,

Estela de Luz, sombra de corrupción

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El expresidente Felipe Calderón denunciado por actos de corrupción en la Estela de Luz, monumento construido durante su gobierno en la Ciudad de México.

La presunta responsabilidad del expresidente Felipe Calderón y altos funcionarios de su gobierno puede quedar al descubierto si procede la denuncia en su contra presentada ante la Fiscalía General de la República.

¿El delito? Abuso de autoridad, ejercicio indebido del servicio público, usurpación de funciones y lo que resulte por la construcción del monumento denominado Estela de Luz que tuvo un costo de mil 304 millones de pesos.

Gabriel Regino, abogado de la empresa III Servicios, acusados de cobrar un sobreprecio de mil 100 millones de pesos, señaló a Felipe Calderón y a funcionarios de su administración como los responsables de un acto de corrupción que ha sido recientemente señalado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

“En el año 2009, el gobierno federal tomó la decisión de convocar a un concurso para elegir y decidir la construcción de un monumento que sirviese para celebrar el bicentenario de la independencia de México y la Revolución.”

“De esa convocatoria resultó ganador un talentoso arquitecto mexicano que propuso la construcción de la Estela de Luz. A partir de ese momento, 2009, la oficina de la Presidencia de la República del sexenio de Felipe Calderón, a cargo de Patricia Flores Elizondo, se hizo cargo de la conducción y dirección de dicho proyecto, un proyecto que nosotros estimamos ya existía la decisión y determinación del desvío de recursos públicos”, expresó

La denuncia vino por parte de extrabajadores de la firma III Servicios SA de CV. De acuerdo con el documento firmado el 23 de septiembre de ese año se colocó la primera piedra, aun cuando ni siquiera se había designado a quien construiría la Estela de Luz, en Paseo de la Reforma.

“Inicialmente para la construcción de dicho monumento, se habían autorizado un presupuesto de 398 mil 924 millones de pesos, y plazo para la conclusión de la obra el 21 de agosto de 2010, sin embargo, el costo total de la obra se aumentó a más de mil millones de pesos, existiendo un retraso de construcción por 15 meses”, señala el escrito en poder de Quadratín.

Los denunciantes solicitan a la FGR, que desde antes como Procuraduría General de la República (PGR), se investiguen parte de estos hechos por las denuncias formuladas en la Auditoría Superior de la Federación (ASF) con los números de averiguaciones previas: AP/PGR/UEIDCSPCAJ/SP/M-XXXII/017/2013, y AP/PGR/ UEIDCSPCAJ/SP/M-XXXII/315/2012.

En 2009, el entonces presidente de la República, Felipe Calderón, lanzó la convocatoria para el Concurso Nacional para la Construcción del Monumento del Bicentenario, la cual ganó el arquitecto César Pérez Becerril, la mente detrás del diseño de La Estela de Luz.

El costo inicial de la construcción se estimó en 398 millones pesos, pero al finalizar se elevó a más de mil 304 millones de pesos y tardó 15 meses más de lo planeado para ser concluida, estos fueron dos de los factores principales para despertar la indignación de muchos mexicanos.