La tecnología ha cambiado al mundo y en esta medida, la economía colaborativa está dispuesta a revolucionar el sistema económico y productivo.
Ciudad de México.- La economía colaborativa está dispuesta a revolucionar el sistema ya que plantea de manera accesible, cubrir las necesidades de las personas de manera rápida y directa, creando un ecosistema productivo en donde las relaciones de negocios personales se amplifican gracias al alcance de este modelo.
De manera simple, los expertos definen a la economía colaborativa como el intercambio de bienes y servicios a través de plataformas digitales, que satisfacen las necesidades de forma directa de las personas.
Casos de éxito mundial sería Uber o las plataformas digitales de transportes individuales. Pero a nivel financiero, este modelo se está convirtiendo en el futuro prometedor de los negocios para los próximos años.
Según señala el sitio Merca 2.0 y que retoma cifras de la consultora PwC, “las entidades empresariales que funcionan bajo este modelo de negocio generarán cerca de 375 mil 000 millones de dólares dentro de la economía global durante 2025”.
Pero la economía colaborativa está dispuesta a revolucionar el sistema ya que rompe con la estructura tradicional en donde para obtener bienes o servicios, tenía que ser a través de las empresas, que tienen un horario establecido, un alcance físico limitado y muchas de ellas se olvidaron por de las necesidades reales de sus clientes.
En cambio, el modelo que resurge a partir del desarrollo tecnológico trasciende estas situaciones y plantea una realidad en donde se pueden encontrar todo lo que se necesita en cualquier momento y se puede elegir entre las opciones que mejor se ajusten a los gustos, deseos o incluso valores de las personas.
Según Jeremiah Owyang, fundador de Crowd Companies, ahora “más de la mitad de los norteamericanos obtienen los productos y servicios que necesitan el uno del otro, de igual a igual, en vez de comprar a las empresas establecidas”.
Para Miguel Collado, economista senior de CREES, esto permite crear un ecosistema productivo en donde todas las personas pueden ser emprendedoras, consumidoras y productivas al mismo tiempo y de forma inmediata.
“Con este modelo de negocios estaríamos creando más emprendedores. Creo que es una oportunidad para que las personas obtengan un ingreso extra”, señala el experto.
Además, la oferta de productos se magnifica, los precios se reducen y se “democratiza el capital”, señaló la revista Forbes.
Finalmente América Latina ha adoptado muy bien este modelo y lo está haciendo crecer, con iniciativas emprendedoras que se apoyan en el trabajo conjunto y los beneficios compartidos.
Así, en “América Latina, Brasil encabeza la lista de países con mayor número de iniciativas de economía colaborativa (32 por ciento), mientras que México y Argentina ocupan la segunda posición (13 por ciento)”, según con cifras de IE Business School.
