La situación es complicada en al menos seis entidades del centro del país, ya que derivado de la estrategia aplicada por el gobierno federal para combatir el robo de combustible, ahora estamos frente al dilema de la gasolina, que baja su precio pero escasea en muchos estados.
Ciudad de México.- La buena noticia en los primeros días del 2019 es que el combustible tuvo un freno en alza de sus precios; pero la mala, es que en algunas entidades el comprar gasolina se ha convertido en toda una hazaña.
Con largas filas en las estaciones de servicio y en ciertos casos limitando incluso los litros de venta por persona, esta es una situación inusual en México pero según el gobierno federal y Pemex, se debe al cambio de logística en la distribución, esto como parte de la lucha contra el huachicoleo que han implementado las autoridades desde la última semana del 2018.
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Bajan los precios y aumentan las preocupaciones
A pesar de que en cierta manera se ha cumplido el deseo de todos los conductores de ver en la entrada de las gasolineras que los precios al menos se han mantenido sin alzas considerables, en estados como Hidalgo, Estado de México, Jalisco, Michoacán, Guanajuato y Querétaro, esto es lo menos importante ya que el objetivo primordial de las personas es poder abastecerse aunque sea con pocos litros.
De acuerdo a información de El Financiero, en algunas de las principales ciudades del país, “los precios de las gasolinas disminuyeron en la primera semana de 2019”.
En la Ciudad de México, Mérida, Cancún y Mexicali, la gasolina Magna bajó entre 20 y 30 centavos; mientras que la Premium lo hizo entre 5 y 15 centavos por litro, según cada marca distribuidora.
Sin embargo, en los estados donde la distribución del combustible ha sido irregular en la última semana y las estaciones de servicio han tenido que cerrar por algunas horas, no solo ha aumentado el precio sino que las posibilidades de conseguir gasolinas han ido disminuyendo con el paso de los días.
Esto ha creado un ambiente de tensión y preocupación entre los ciudadanos, que ante un escenario de escases, algunos hacen largas filas afuera de las gasolineras que aún tienen combustible y otros hacen compras de pánico en garrafones o recipientes de plástico, para tener al menos una reserva por si las cosas continúan igual.
Bajo estas circunstancias, el sueño de pagar menos por cada litro de gasolina se ha convertido en una pesadilla para muchos, ya que en todo caso, estarían dispuestos a desembolsar más para poder tener un abasto garantizado y continuar con sus labores y no afectar las actividades productivas de los estados afectados.
Robo de combustibles a Pemex; la gran ordeña al presupuesto
¿Falta de planeación?
De acuerdo a Ramsés Pech, analista experto en temas de energía, si bien esto es consecuencia de la estrategia implementada por el gobierno federal para frenar el robo de combustibles, también es una falta de planeación por parte de las autoridades.
Esto “no responde a un tema de desabasto en gasolina, sino a un embudo interno de logística de Pemex provocado por el cierre de ductos, lo cual evitó atender la demanda y surtir a las estaciones de servicio”.
Y de acuerdo al especialista, no se debe a que no haya producto y “no puede hablarse de un desabasto”, sino es más bien una consecuencia de la “falta de envío a las estaciones de servicio por una logística inadecuada” por parte de Pemex.
En cierta medida Petróleos Mexicanos confirma lo dicho por el experto, ya que en un comunicado de prensa, aseguró que “el restablecimiento del suministro de combustible avanza en Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Querétaro y Estado de México”, pero reconoció que “se han generado retrasados en la distribución para el restablecimiento del suministro de combustible”.
Además, aseguró que las “Terminales de Abastecimiento y Despacho cuentan con los inventarios suficientes para satisfacer la demanda de la población, por lo que el país no enfrenta desabasto ni escasez de los productos”, por lo que llamó a la ciudadanía a “evitar compras de pánico”.
Aún no es fácil dimensionar los efectos que puede tener esto en las economías locales, lo que sí se puede percibir es que de alguna manera esta situación ha creado un ambiente de molestia e incertidumbre en la sociedad, algo que se puede considerar normal pero esperemos que sea un pequeño costo momentáneo a cambio de beneficios futuros.
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